Parece que la industria automotriz ya no tiene pretextos para generar automotores amigables con el medio ambiente, que eviten el consumo de hidrocarburos. El creador de Tesla Motors, Elon Musk, ha liberado sus patentes con el objetivo de que entre todos los empresarios de esta industria se tomen acciones reales para combatir el cambio climático, empezando por acelerar la llegada del transporte sustentable, lo cual ha sido siempre la meta de Tesla.
“Si inventamos un camino para la creación de atractivos vehículos eléctricos, pero luego sembramos minas antipersonales de propiedad intelectual detrás de nosotros para ahuyentar a otros, estaríamos actuando de manera contraria a ese propósito” ha declarado Musk.
De acuerdo a la estadística el mercado automotriz fabrica 100 millones de autos al año; estos se suman a los 2 mil millones de autos que ya circulan en el planeta, aproximadamente. Por lo que, es innegable la necesidad que otras compañías, además de Tesla, puedan fabricar automóviles eléctricos para enfrentar las crisis de combustible, razón por la que la empresa de Musk ha aplicado la filosofía de “código abierto” para crecer la oferta en el mercado.
El objetivo es que la movilidad mediante energías limpias, no solo impacte a particulares, sino también a vehículos de servicio y transporte público.
