San Miguel de Allende, Gto. Habitantes de las comunidades aledañas a la Presa Allende están solicitando el apoyo de la población para continuar con la limpieza del lirio acuático que infesta la presa.
Casimira Hernández León, de la fundación Salvemos la Presa Allende, invita a las personas interesadas en ayudar a retirar esta flora invasiva a unirse a las labores de limpieza.

“El día de mañana sábado se hace la invitación masiva a las personas que vengan a ayudarnos a sacar lirio, con comida o a apoyarnos con dinero para pagar la maquinaria”, mencionó la organizadora durante una entrevista.
A unos metros de la orilla de la presa, las plantas de lirio incluso florecen mientras su extracción es llevada a cabo por un barco especial proporcionado por la administración municipal.
El operador y su ayudante trabajan durante la semana retirando el interminable lirio, mientras que los fines de semana, especialmente los sábados, se realizan jornadas de limpieza en las inmediaciones de la comunidad de Salitrillo.
Sin embargo, la falta de maquinaria y de personal para realizar estas labores es una complicación constante, pues la mancha verde de lirio crece y se expande rápidamente.

“No hemos visto que la CONAGUA meta las manos o que otra dependencia federal nos ayude con la problemática”, comentó otro de los habitantes.
Los habitantes también hicieron un llamado a ciudadanos de municipios como San Felipe, Dolores Hidalgo y San Diego de la Unión para emprender acciones similares en caso de detectar lirio flotando en sus cuerpos acuáticos.
Otra de las voluntarias mencionó que la plaga de lirio ha invadido el hábitat local, afectando la fauna.

“Cuando sacamos lirio se quedan los claritos de agua, entonces los pescados buscan el agua, el oxígeno para ellos también sobrevivir”.
Desde hace al menos cuatro años, la problemática del lirio ha sido una constante que no se ha logrado combatir del todo.

“Que nos apoye más gente, por favor, porque hemos retirado bastante lirio, pero necesitamos mucha ayuda. Los sábados teníamos alrededor de 300-400 personas, pero ha ido disminuyendo”, añadió Casimira Hernández León, conocida como ‘Casi León’.