Guanajuato. Despedir colaboradores, cerrar sucursales, abandonar el sueño de empresa fueron las decisiones que se pusieron en la mesa ante la llegada de una pandemia que tomó a todos por sorpresa. Las opciones: diversificar sus productos o no hacer nada.
Lilit Martínez y Nadia Sierra ambas mujeres empresarias de León, comenzaron la lucha contra los estragos de una contingencia en donde lo principal era “aguantar” para pagar la nómina.
“El giro de la belleza es uno de los que cerraron, tanto distribuidores y salones, ni siquiera con citas y en ese momento nosotros nos damos cuenta que tenemos materias primas y que empiezan a escasear cubrebocas y gel. Todos los materiales se fueron por las nubes y nosotros aunque somos una empresa chiquita no queríamos sacrificar a nuestro personal“, cuenta Nadia Sierra.
Junto con su esposo tienen años dedicándose al sector de belleza, incluso estaban a un paso de que sus productos atravesaran fronteras cuando la Covid-19 frenó sus proyectos.
“No podían quedarse con la mitad del sueldo y empezamos a hacer estos productos, pero certificados para que nos considerarán una actividad esencial pero además competentes y dar una certeza y aún así de la parte operativa tuvimos que sacrificar a un empleado y de la administrativa a una chica también”, lamenta la empresaria.
Laitinen Professional Beauty S. de R.L. de C.V., cambió el hacer cera de depilar y todo tipo de cosméticos por cubrebocas y gel, giro que ahora forma parte de su empresa de nueve personas y que esperan sume más empleos.
Las proyecciones negativas
Apenas era agosto de 2020 y la proyección de la Secretaría de Desarrollo Sustentable era perder hasta 100 mil empleos entre formales e informales.
Las cifras hasta ese mes era que 50 mil personas perdieron sus trabajos en diferentes sectores de acuerdo a datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Por sectores el golpe iba en ascenso: el gremio del cuero calzado ya había perdido 12 mil empleos, turismo 10 mil, en el sector automotriz 11 mil empleos y en la construcción siete mil.
Era el corredor industrial las zonas que más estaban sufriendo con el desempleo; León con 26 mil 495 empleos menos, seguido de Irapuato con 4 mil 764, Celaya con 4 mil 500, Silao con 4 mil 200, San Francisco del Rincón con 2 mil 548 y Guanajuato capital con mil 813.
Adiós a la sucursal
Los primeros tres meses de contingencia, la empresa de Lilit Martínez soportó las bajas ventas y el pago a la nómina, junto con el resto de pagos de servicios, a los seis meses se volvió insostenible.
Dedicados a la pastelería y panquelería, tuvieron que decirle adiós a su sucursal ubicada en el bulevar González Bocanegra, pero eso valió evitar despedir personal.
“El 2019 y 2020 se proyecta con un crecimiento que no nos imaginábamos, patrocinando eventos, haciendo más de mil pasteles. Cuando llega esta situación, aguantamos tres meses, cinco meses y ya llegó noviembre y por salud económica decidimos cerrar y enfocarnos en la matriz”, señaló la empresaria.
Sin eventos de todo tipo, su esposo e hijos además de seguir impulsando la pastelería decidieron comenzar con un giro opuesto: la venta de arcos sanitizantes.
“Sin dejar lo nuestro pues empezamos con los arcos, pero lo que más queríamos era no descuidar nuestra empresa. En la mano de obra de los arcos están mi marido y mi hijo que están impulsando este nuevo proyecto que tenemos y que nos generó más empleos”, cuenta Lilit.
El objetivo es volver a tener la segunda sucursal que la pandemia les arrebató.
Lo que sigue: reactivación y renovación
Luis Gerardo González, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCEL) señaló que aunque la economía se recuperará de forma lenta, las empresas deben avanzar a diversificarse y adaptarse.
“Ahora toca la inteligencia de mercado, el miedo mata y si estamos panicados en lugar de salirnos del cuadro y ver oportunidades no vamos a salir, tenemos que ver a dónde van las oportunidades” , comentó el líder empresarial.
Autoridades de todos los niveles han comenzado a informar sobre una recuperación paulatina de empleos y de fuentes de trabajo, aunque aún la entidad sigue por debajo de los niveles de 2019.
Analistas prevén una recuperación, sin embargo, esta podría tomar de cinco a siete años.
