Ciudad de México, 4 de abril (SinEmbargo).– Los mercados internacionales entraron en un viernes negro después de que un día anterior cayeron fuerte, o a pesar de ello. Producto de la turbulencia, el dólar estadounidense se fortaleció y esto le pegó al peso mexicano, que en el arranque de la sesión perdió casi 3 por ciento: lo que había ganado ayer. También el principal indicador de la Bolsa Mexicana de Valores se desplomó al 3 por ciento en su apertura cuando un día antes había ganado.

El dólar subió, recuperándose antes del muy esperado informe mensual de empleo y tras la caída de la sesión anterior. El euro bajó después de los débiles pedidos industriales alemanes. Los analistas creen, sin embargo, que las decisiones de Donald Trump sobre comercio hace que cualquier recuperación se someta a las noticias de corto plazo. China, por ejemplo, le respondió a Estados Unidos con un arancel de 34 por ciento a todos sus productos a pesar de que los chinos padecen un 54 por ciento de impuesto a sus productos cuando tienen acceso al mercado estadounidense. Esto último inyectó mayor inestabilidad.
Las agresivas medidas comerciales provocaron una fuerte venta en las acciones estadounidenses, reduciendo incluso los rendimientos del Tesoro estadounidense y presionando al dólar. Deutsche Bank advirtió sobre el riesgo de una crisis de confianza en el dólar estadounidense, la principal moneda de reserva mundial: “Nuestro mensaje general es que existe el riesgo de que importantes cambios en la asignación de flujos de capital se impongan sobre los fundamentos de las divisas y que los movimientos del mercado de divisas se vuelvan desordenados”, dijo George Saravelos, de Deutsche Bank, en una nota.
China responde a @realDonaldTrump con aranceles del 34% a productos de EEUU a partir del 10 de abril https://t.co/2Wn26sfAav pic.twitter.com/1Hgy1EKjFC
— Europa Press TV (@europapress_tv) April 4, 2025
El plan
“En las semanas previas a sus expansivos aranceles globales, el Presidente Trump y sus principales asesores intentaron preparar al público para el sufrimiento económico. Advirtieron que, si bien su agresiva estrategia comercial tendría consecuencias, estas serían efímeras y beneficiarían a la economía a largo plazo. Inversores, empresas y otros dejaron claro el jueves que la economía estadounidense no estaba preparada para aceptar ese enfoque. Los mercados globales se desplomaron, los economistas advirtieron de una posible recesión y los consumidores se prepararon para el aumento de precios de automóviles, alimentos, ropa y más”, dice esta mañana The New York Times.
El tsunami inicial subrayó “lo arriesgado que es la agenda de Trump, que el Presidente ha presentado como un doloroso procedimiento médico para rescatar una economía que comparó con un ‘paciente enfermo’. Para Trump, Estados Unidos experimentará un ‘auge’ una vez que sus aranceles hayan tenido tiempo de restablecer las relaciones comerciales del país, aumentar los ingresos e impulsar la producción nacional”, agrega el diario.
Luego dice: “Pero se espera que estos aranceles disparen los precios mientras tanto, una situación indeseable para los estadounidenses que ya sufren años de precios elevados. Varios economistas han aumentado la probabilidad de una recesión en sus pronósticos, al proyectar una desaceleración del gasto de los consumidores, la inversión empresarial y el crecimiento económico”.
.@POTUS: “This is a patient that was very sick… We’ve lost 90,000 plants since NAFTA… and about 6 million jobs. It was a sick patient. It went through an operation on Liberation Day. And it’s going to be a booming country.” pic.twitter.com/IHoNZ3VSqg
— Rapid Response 47 (@RapidResponse47) April 3, 2025
La revista británica The Economist dijo en su edición de ayer: “Si no lograste ver que Estados Unidos está siendo saqueado, violado y expoliado por naciones cercanas y lejanas, o que se le niega cruelmente una oportunidad para prosperar, entonces felicidades: tienes una visión más clara de la realidad que el Presidente de Estados Unidos. Es difícil saber qué es más inquietante: que el líder del mundo libre pueda soltar disparates sobre su economía más exitosa y admirada, o que el 2 de abril, impulsado por sus delirios, Donald Trump anunciara la mayor ruptura en la política comercial estadounidense en más de un siglo y cometiera el error económico más profundo, dañino e innecesario de la era moderna”.
“Si se mantienen los aranceles actuales, es muy posible que se produzca una recesión en el segundo o tercer trimestre, así como un mercado bajista”, dijo David Bahnsen, director de inversiones de The Bahnsen Group, citado por el diario español El País.
China y el efecto China
China reaccionó con fuerza a los aranceles del Presidente Trump, aplicando gravámenes del 34 por ciento a todos los productos importados de Estados Unidos. Pekín afirmó que los gravámenes entrarían en vigor el próximo jueves, un día después de la entrada en vigor de gran parte de los aranceles prometidos por Trump. “China se equivocó; entró en pánico”, replicó Trump.
— Rapid Response 47 (@RapidResponse47) April 4, 2025
“Los mercados no se sintieron cómodos con la disposición de Trump a negociar sobre los aranceles. Los gravámenes anunciados el miércoles por la noche fueron más profundos y agresivos de lo que esperaba el mundo empresarial. E incluso mientras Trump dejaba la puerta abierta a la posibilidad de llegar a acuerdos, prometió nuevos aranceles sobre medicamentos y microchips”, explica esta mañana The Wall Street Journal.
Marco Rubio, Secretario de Estado de Trump, reconoció que “los mercados se están desplomando”, pero afirmó que las economías no lo estaban y que las empresas globales se adaptarían al nuevo entorno. Trump aseguró que los inversores estaban invirtiendo grandes cantidades en Estados Unidos, y aseveró en una publicación en redes sociales que era un “gran momento para enriquecerse”. Este dicho parece, en los hechos, no tener sustento.
Esta es “otra oleada de miedo que recorre los mercados”, afirmó Susannah Streeter, analista de Hargreaves Lansdown. “Se trataba del temor de que no fuera una simple ronda de aranceles en Estados Unidos contra sus socios, sino de que se intensificaran hasta desembocar en una guerra comercial a gran escala”.
Y eso, una guerra comercial a gran escala, es lo que vivimos hoy.