Guanajuato enfrentará una transición política en el 2012 estable y que no pondrá en riesgo el comportamiento financiero de la entidad, sin embargo, prevé un estancamiento con respecto a los cinco años anteriores, debido al freno en el presupuesto federal ante el clima político que se vivirá.
Así lo reveló el reporte de Standard & Poor’s en su reporte de este viernes donde, por cierto, confirma su nota MXAA al gobierno estatal que lo coloca como una entidad con perspectiva crediticia estable por su efectividad política en el control del gasto y sus mecanismos de transparencia.
Según el portal de la calificadora financiera internacional, hasta el 30 de junio, la deuda de Guanajuato sumaba 7 mil 551 millones de pesos (559 millones de dólares) de acuerdo con la Secretaría de hacienda, pero Standard & Poor’s confirmó su nota MXAA por el manejo de la deuda y la estabilidad financiera que se vive en este territorio.
La calificación de Guanajuato, refleja un desempeño presupuestal estable que le permite cubrir su programa de inversión en infraestructura, sin afectar su posición de liquidez o incurrir en montos significativos de deuda.
“La calificación también refleja la continuidad en la aplicación de adecuadas políticas administrativas, incluyendo su efectiva política en control de gasto y sus mecanismos de transparencia, así como nuestra expectativa de que la transición política en el estado, durante 2012, no representará riesgos operativos o financieros de consideración”, explica el reporte.
No obstante revela que “para el 2012, el desempeño presupuestal de Guanajuato se podría ver presionado ante el lento crecimiento estimado de las transferencias federales y, el proceso electoral a nivel estatal y federal. Si bien no esperamos que el impacto sea considerable, un superávit operativo inferior al 5 por ciento de los ingresos operativos y un déficit presupuestal, después de gasto de inversión mayor al 4 por ciento de sus ingresos totales, que a su vez se traduzca en debilitamiento de la posición de liquidez, podrían presionar su calificación a la baja”.
LOS REZAGOS PENDIENTES
Si bien en Guanajuato se han realizado fuertes inversiones en el gasto social que promedian aproximadamente 6 mil 500 millones de pesos que representan el 17 por ciento del gasto total “algunos de sus indicadores de cobertura básica, tales como los servicios de agua y drenaje, así como los índices de alfabetización, todavía se encuentran por debajo del promedio nacional”.
Abunda también que la dispersión en 14 centros urbanos de más de 100 mil habitantes, dificulta la capacidad del estado para atender las necesidades de desarrollo para toda la población.
Pese a ello, la calificadora más quisquillosa, tanto que eliminó su buena nota al gobierno de Estados Unidos para contracción de deuda, considera que de continuar el estado financiero de Guanajuato como hasta ahora, en el 2012 se mantendrá la misma calificación pese al riesgo en la disminución de recursos federales.
