Ciudad de México, (SinEmbargo). En el marco de la caída de ingresos petroleros y el gasto en programas sociales, el titular de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, Alfonso Ramírez Cuéllar, en coincidencia con el Secretario de Hacienda, Arturo Herrera Gutiérrez, prepara una iniciativa para que las grandes empresas digitales ubicadas en el extranjero que prestan servicios en México paguen impuestos por lo que cobran a los usuarios.
De enero a junio, los ingresos tributarios (Impuesto Sobre la Renta, Impuesto al Valor Agregado, Impuesto Especial sobre Producción y Servicios) crecieron un 4.4 por ciento frente al mismo periodo del año pasado, y los ingresos petroleros (Pemex y Fondo Mexicano Petrolero) cayeron un 16.7 por ciento, de acuerdo con cifras del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
“No se aplicará nuevo impuesto a los consumidores para compras por internet. Ahorita los usuarios ya están pagando y hasta los choferes de Uber, pero los que no pagan son las plataformas”, aclaró en entrevista con SinEmbargo el Diputado morenista Ramírez Cuellar, y documentó que el 41 por ciento de los mexicanos consume un bien o servicio a través de plataformas digitales, por lo que al cobrar IVA a las firmas digitales en su mayoría estadounidenses se asegura una competencia justa con las empresas mexicanas que ya lo pagan.
El mercado de las plataformas digitales, expuso, genera un volumen de operaciones que supera los 400 mil millones de pesos, pero “no pagan cuotas de seguridad social, ISR ni tampoco IVA”, por lo que gravar sus ingresos representaría un ingreso a las finanzas públicas “mínimo de 10 mil millones de pesos, dependiendo de cuántas entren al esquema”, dijo el Diputado, quien evalúa una tasa de 16 por ciento de IVA a Amazon, Uber, Airbnb, Netflix y Spotify.
De acuerdo con el informe “Panorama Fiscal de América Latina y el Caribe 2019” de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), se calcula que México obtendría ingresos fiscales por 178.8 millones de dólares al año si se cobra el 16 por ciento del IVA a los servicios digitales y se grava con 3 por ciento los servicios de intermediación de plataformas multilaterales como Uber.
La propuesta se presentará después del 1 de septiembre cuando inicie la Legislatura con miras al Paquete Económico 2020.
El consultor en políticas públicas sobre tecnología e innovación, José Alfaro Díaz, planteó que un impuesto casi siempre acaba afectando al usuario porque las empresas aumentan el precio de sus productos.
“En el contexto de los impuestos a empresas digitales todavía es pronto para evaluar el impacto que tendría un impuesto en los consumidores. No obstante, consultorías como Deloitte o las mismas empresas afectadas, por ejemplo Amazon, han hecho proyecciones en donde encuentran que el incremento del impuesto afectaría al usuario”, dijo.
Carlos Alberto Burgoa Toledo, especialista y conductor del programa Consultorio Fiscal de la UNAM, coincidió en que “aunque el impuesto tenga de forma expresa destinatario a aquel que vende bienes o presta servicios vía electrónica, quien va acabar soportándolo es el consumidor-usuario final. Es un efecto financiero antes que tributario”.
El Secretario de Hacienda Arturo Herrera destacó que el comercio electrónico en México representa el 5 por ciento de la economía nacional y ejemplificó que en el cine el IVA se paga al comprar el boleto. Pero cuando alguien ve una película en Netflix, no está claro si los impuestos se tendrían que pagar en California, Estados Unidos, la sede de la empresa, donde están los servidores o donde se ve la película.
“Estos impuestos no son nuevos, son el IVA y el ISR tradicionales, pero recolectarlos en el comercio electrónico es complicado. De manera constructiva estamos trabajando con Uber y Sin Delantal, entre otros, en un programa piloto que permite su recaudación”, tuiteó Herrera hace unos días.
Titulares de Hacienda y SAT con representantes de plataformas digitales. Foto: Cuartoscuro.
Hacienda, a través del Servicio de Administración Tributaria (SAT), inició desde el 1 de junio un programa piloto de retención mensual de impuestos para conductores y repartidores de plataformas digitales como Uber, Cabify o Sin Delantal, en un 8 por ciento de IVA y de 3 a 9 por ciento de ISR. De acuerdo con el organismo existen 800 mil contribuyentes inscritos dentro de las plataformas digitales.
“Esta medida no representa un impuesto nuevo ni modificaciones en tarifas para los usuarios, así como tampoco modifica la tasa de servicio de Uber. Además de reducir su carga fiscal, facilita el proceso de pago de los impuestos y obligaciones fiscales ya existentes para prestadores de servicios independientes”, manifestó Uber México luego del acuerdo. “Esta colaboración entre Uber y el Gobierno Federal de México sienta un precedente en materia fiscal”.
El área de comunicación de Amazon Mx dijo no tener ningún comentario al respecto de los impuestos a ingresos.
El Diputado Alfonso Ramírez Cuellar compartió que han mantenido diálogo con la Secretaría de Hacienda y se planean reuniones con los directivos de las plataformas digitales la próxima semana.
La propuesta de México, en línea con las recomendaciones de la @cepal_onu y la @OECD, va encaminada a que las empresas residentes en el extranjero que prestan sus servicios en territorio nacional, paguen impuestos por los ingresos que reciben de los consumidores mexicanos. https://t.co/DhPAb8Psly
— Alfonso Ramírez Cuéllar (@aramirezcuellar) August 13, 2019
LA PROMESA DE CAMPAÑA DEL PRESIDENTE
Ambos especialistas consultados aseguraron que esta iniciativa abonaría a un incremento de ingresos tributarios y a adaptarse a la economía digital.
En el contexto europeo, expuso el consultor José Alfaro, se busca gravar a los ingresos de las empresas. El Reino Unido planea cobrar el 2 por ciento, en España la tasa Google propone el 3 por ciento, y en Francia ya se impuso el 3 por ciento de impuesto GAFA (Google, Apple, Facebook, Amazon) posterior al impuesto YouTube-Netflix.
En América Latina, comparó, se ha privilegiado el IVA. Por ejemplo, Argentina, Uruguay y Colombia han cobrado el IVA a plataformas digitales del 20 por ciento aproximadamente, de acuerdo con un estudio de la CEPAL.
No obstante, dijo el especialista fiscal Carlos Burgoa, “en el caso mexicano se ve un poco más complejo dado que la promesa de campaña del actual Presidente fue no establecer ningún impuesto dentro de los primeros tres años”, añadió.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador ha insistido en no aumentar impuestos ni crear impuestos nuevos. “Estamos elaborando el proyecto de Ley de Ingresos y de presupuesto para el año próximo. Informo a los mexicanos que vamos a seguir cumpliendo con el compromiso de no aumentar los impuestos en términos reales y de no crear impuestos nuevos, no sólo este año, también el año próximo”, dijo esta semana en conferencia matutina.
El ex Secretario de Hacienda Carlos Urzúa comentó en entrevista con la revista Proceso –después de su renuncia– que el rechazo de López Obrador a una reforma fiscal es “quizá por no enfrentarse con algunos empresarios, quizá por el coste electoral”, pero “no es sencillo tener un balance presupuestal y al mismo tiempo muchos programas sociales”.
El Diputado Alfonso Ramírez reiteró que no se trata de un nuevo impuesto, “ese ya existe, solo que algunos no lo pagan; y la idea es que lo paguen todos”.
Los principales ingresos a las arcas del Gobierno federal provienen de impuestos y sus principales gastos son para el sector energético y programas sociales, de acuerdo con el análisis del CIEP al Paquete Económico 2019.
El 32.9 por ciento de los ingresos estimados para este año son del ISR, y el 18.9 por ciento del IVA; mientras el 19.1 por ciento del gasto se va al área de energía y combustibles, y el 17.8 por ciento a los denominados Programas para el Bienestar como las becas, pensiones y tandas.
Pese a ello, México se mantiene como el país donde menos impuestos y contribuciones sociales se pagan de las naciones miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la cual busca que en 2020 sus países miembros alcancen un acuerdo para gravar a grandes empresas digitales considerando el lugar donde generan sus ingresos y no en los países sede.
La Cepal también ha enfatizado que los ingresos totales de los países de Centroamérica y México descendieron debido a la reducción de los ingresos no tributarios (como los petroleros) y la ralentización de la recaudación tributaria, especialmente en el caso de los impuestos sobre el consumo.
“No hacerse cargo de los desafíos tributarios de la digitalización de la economía implica renunciar a una cantidad importante de recursos fiscales, renuncia que será cada vez mayor en la medida en que los nuevos modelos de negocio de la economía digital se vayan consolidando”, destacó la Cepal en su informe sobre el panorama tributario de la región.
No obstante, en la experiencia europea el camino no ha sido llano. El consultor Alfaro Díaz expuso que se han generado conflictos comerciales a nivel internacional (“Anunciaremos acciones recíprocas substanciales sobre la estupidez del [Presidente francés] Macron”, advirtió el Presidente Donald Trump sobre la tasa GAFA de 3 por ciento en Francia), resistencias de otros países en la Unión Europea por el impacto que podría tener en la zona euro, y Nick Clegg, Vicepresidente de Facebook, sugirió que debe de lograrse un acuerdo global.
LA INICIATIVA DE 2018
Hace casi uno año, el 6 de septiembre de 2018, el Diputado Javier Salinas Narváez presentó una iniciativa con proyecto de decreto para la Ley del Impuesto sobre los Ingresos Procedentes de Servicios Digitales que en 17 artículos propone que la tasa se fije en un 3 por ciento.
“Están obligadas al pago del impuesto sobre los ingresos (brutos totales) procedentes de servicios digitales, las personas físicas y morales residentes en territorio nacional, así como los residentes en el extranjero con establecimiento permanente en el país, por los ingresos que obtengan, independientemente del lugar en donde se generen”, expone el artículo 1 de la iniciativa.
Especifica que se excluye a las pequeñas y emergentes empresas, y será la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, a través del Servicio de Administración Tributaria, la encargada de establecer las obligaciones en materia de contabilidad, registros y otros aspectos destinadas a garantizar el pago efectivo del impuesto.
En la parte de argumentos, la iniciativa de Salinas Narváez expone que “la aplicación de las normas actuales a la economía digital ha llevado a un desajuste entre el lugar donde se gravan los beneficios y el lugar donde se crea valor, en particular en el caso de los modelos de negocio que dependen en gran medida de la participación de los usuarios”.
El Diputado ex perredista, que se unió a la bancada de Morena, aclaró que no se busca cobrar impuestos a los usuarios, y tampoco aumentar los precios de bienes y servicios ofertados por las empresas “que no pagan gravámenes, pese a realizar actividad empresarial”.
“Tuvo muchas observaciones dado que no estaba del todo completa o bien realizada”, evaluó el especialista fiscal de la UNAM, Carlos Burgoa Toledo. “Para que la Ley se adopte a internet requiere de todo un proceso que tarda tiempo y tendría que pensarse en un mecanismo más flexible para que se pueda lograr el cobro [a las plataformas digitales]”.
El Diputado Alfonso Ramírez Cuellar que impulsa una iniciativa parecida dijo que se está tomando en cuenta.
