Guanajuato, Gto. Con el cierra de la mina El Cubo, que se concretó recientemente, crecerá la pobreza en el poblado del mismo nombre y aumentará el riesgo de que aumente el robo de mineral.

Los mineros que trabajaban en la mina El Cubo y que eran parte del Sindicato Nacional de Mineros Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana fueron liquidados el miércoles de la semana pasada, con lo que se concretó el cierre de la mina, que anunció la propia empresa Endeavour Silver desde el 21 de noviembre pasado.
En la vieja mina que data de la época de la colonia, en los últimos meses sólo trabajaban obreros afiliados al sindicato, a inicios de año era más de 400, pero en esas fechas se dio un primer despido de más de cien trabajadores.
La gente de la comunidad con la que Zona Franca platicó, confirmó que fue el miércoles de la semana pasada, cuando se liquidó a todos los mineros, sólo quedan empleados de confianza y de seguridad, se informó.
“Sí está triste y se va a poner más feo, ya ni borrachos hay, porque no hay dinero; el problema es que va a crecer el robo del mineral”, dijo un hombre que trabajó en la mina hasta el mes de febrero pasado.
“La mina nunca había parado, solo cuando hubo la huelga de 2010, dicen que puede reabrir, y que lo que quieren los canadienses es deshacerse del sindicato, dicen que les tocó a cada uno entre 200 mil a 350 mil pesos de liquidación”, agregó el minero.

“No le daban trabajo a la gente de El Cubo, que por que son rateros, ahora lo que va a suceder es que haya más lupios”, dijo una mujer, quien afirma que en días pasados ella vio a un grupo de muchachitos con la intención de entrar a la mina a sustraer mineral.
“Es triste que los muchachitos bajen a la mina, es muy arriesgado, se meten sin ninguna protección por los respiraderos, no son los hijos de uno, pero es gente conocida, se meten descolgando por agujeros y no traen ni casco”, dijo la mujer.
Ella agregó que ya han ocurrido peleas entre personas que entran a la mina con la intención de robar el mineral: “el otro día andaba un muchacho de El Cedro en una moto y con un rifle viejo colgado a la espalda, y la policía nunca viene”.
La señora María N. quien tiene una tiendita, dijo que ya no se vende nada, y que es porque la gente no tiene dinero: “los canadienses nada más vinieron a saquear y al pueblo nada le dejaron, solo pobreza y problemas”.
En el acceso a las instalaciones de la mina, el guardia, un hombre alto, de tez blanca y con acento norteño, dijo que el no sabía nada y que nada podía informar.
Así, lo que la empresa canadiense Endeavour Silver informó se concretó, aunque se había dicho que el ultimo día de labores sería el 30 de noviembre se continuó laborando unos días más.
“Pónganle en la nota que estamos en la pobreza, el cierre de la mina nos está afectando, ya hasta hubo un asesinato en San Martincito; no hay justicia, si hay pobreza es porque no hay justicia, los canadienses no quisieron que en el pueblo hubiera señal de teléfono, eso es absurdo, estamos aislados, nos queda rezar a ver si cae comida del cielo”, agregó la mujer molesta.