Guanajuato, Gto. Siete familias marcharon en la capital, conformando el colectivo ‘‘Fe y Esperanza”, con la finalidad de encontrar a sus familiares en el municipio de Guanajuato.
Buscan a Yareli Licea, desaparecida el 22 de enero de 2021; a Melanie Guadalupe Muñoz Ramirez, desaparecida el 20 de febrero de 2021; a Rosa Isela Alfaro Camaño, que desapareció el 19 de febrero de 2021, al taxista Aarón Andrés Ahedo Gutiérrez, que desapareció el 28 de febrero de 2022; a Víctor Adrián Carrillo, que despareció el 16 de enero de 2022, a Joaquín Nicolas Guerrero Pacheco, no localizado desde el 27 de enero del 2022, y a ‘Chavita’ que lleva más de 7 años sin ser encontrado.
“En Guanajuato capital no había un colectivo”, cuenta Evelyn Sánchez, la representante del grupo, que busca a su esposo, Víctor Adrián desde el 16 de enero. A la marcha lo acompaña su hijo. Señala que tiene dos semanas de conformarse el grupo.
“Queremos que este colectivo sea exclusivo para Guanajuato Capital; gente de aquí de Guanajuato estaba en colectivos de Irapuato, hasta Querétaro”, expresa.
La señora Martha Macías, que busca a su hija, Yareli Licea desde hace un año y 4 meses, cuenta que sabe que hay más casos de desapariciones en la capital que las 7 familias que integran el colectivo.
“Se empezaron a unir a nosotros porque la gente perdió la esperanza. Esta es una lucha…es cansado estar tocando puertas. Las mismas autoridades no se dan abasto”, expresa.
Yareli Licea desapareció el 22 de enero del 2021, en Guanajuato. En las “Lomas de Padre”. Al menos es lo último que muestran las cámaras de vigilancia que le mostraron. Señala que su hija iba a desocupar la casa donde vivía. Esa fue la última vez que conversó con ella.
“Ya de esa vez no la volví a ver. No me contestó el teléfono. No me contestó mensajes de WhatsApp”, cuenta.
“Yo ya estoy bien desesperada. Ya quiero encontrar a mi hija, porque nadie dice nada, nadie sabe dónde está, o qué pasó: nadie la vio. Parece que Guanajuato es el Triángulo de las Bermudas —así le pusimos, porque desaparecen y nadie ve nada—. Las cámaras se descomponen. Por eso ya queremos una respuesta. Estamos hablando de seres humanos, no de cosas. Son seres humanos que se están perdiendo, ¿qué está pasando que se están perdiendo?”, expresa la señora Macías.
La señora Elva Esther está buscando a su hijo, Nicolás Joaquín Guerrero, que se perdió el 20 de abril a las 8 de la noche.
Cuenta que las personas responsables de la búsqueda acudieron durante los primeros momentos tres veces a la semana “pero ya ahorita tiene mucho que no se han parado”.
“A donde quiera que iba lo hemos andado buscando: a donde iba a bañarse, a correr. Pero no hay nada, en la Presa de la Purísima, las Teresas, y nada. Ya me he ido a Moroleón y no hemos encontrado nada. Por eso estamos aquí, para ver si nos pueden apoyar. No es nada más es él, ya se han perdido más aquí”, comentó.
La madre de Nicolás Joaquín, contó que las personas responsables de la búsqueda dejaron de acudir a su casa, pues no la encontraban cuando la buscaban porque trabajaba, entonces dejó su trabajo.
Le ayudaba a una señora planchando y lavando. “Pero ya no fui por estar en la casa. Y hasta ahorita yo tengo un mes de que no he ido a trabajar, pero ya no han ido”.
Tras la marcha, después de la reunión con asistentes de la Secretaría de Gobernación con las representantes del colectivo, las madres y familiares comentaron que llegaron al acuerdo de exponer su caso a la Comisión de Búsqueda. Solicitaron hablar con el gobernador, Diego Sinhue Rodriguez Vallejo, que hablará con ellas en un plazo de 4 días.
