León, Gto. La Sierra de Lobos se convierte en el escenario perfecto para dejar el estrés de la ciudad y conectar un rato con la naturaleza, aunque esto signifique romper la cuarentena y arriesgarse a ser contagiado del COVID-19 a través de su vía de transmisión comunitaria.
Durante uno de los fines con mayor número de contagios de coronavirus, habitantes de los municipios aledaños a esta reserva natural como León, San Felipe, Ocampo y Silao, rompieron el confinamiento y fueron a la Sierra de Lobos a pasar un rato recreativo en la naturaleza.
Vehículos y camionetas con familias acudieron cargados de cervezas, asadores y comida para pasar una tarde entre paisajes con distintos tipos de vegetación como el bosque de encino, bosque de encino-pino, chaparral, matorral subinerme y matorral espinoso.
Los bikers, ciclistas y atletas van a los diferentes parajes de la carretera León-San Felipe.
‘No vamos a un lugar cerrado estamos en la naturaleza’, dice un deportista de alto rendimiento.
Muchos clubes de motociclistas se quedan de ver en la colonia Los Castillos, donde arranca la travesía una vez que están acompañados. Aunque donde quedaron de verse y a su llegada a observar los paisajes ninguno portaba cubrebocas.
En un recorrido hecho por Zona Franca, se confirmó que en diferentes tramos de la Sierra había decenas de personas y aunque no estaban confinadas, permanecían en lugares donde regularmente no hay nadie más que los pobladores que dependen de los cotidianos turistas.
‘En minimoto o en bicicleta de montaña, recorrer la sierra es mejor que ir a un centro comercial’, dicen los entrevistados.
Alrededor del kilómetro 19 de esta carretera, en el corazón de la sierra, hay un tramo en donde un lago es el punto de reunión de los visitantes. Negocios donde venden alimentos como quesadillas y café de olla, no cerraron sus puertas, ya que semanalmente es punto de reunión de los amantes de la naturaleza.
Los aventureros del aire libre pueden montar caballo por las diferentes áreas cerriles de la Sierra, pues los ganaderos de la zona por 70 pesos ofrecen un viaje de media hora por los alrededores a sus visitantes. Los niños son los que más prefieren esta actividad.
En la sierra no hay gel antibacterial más que el que algún provisionado visitante cargó para su visita. Los pacientes asintomáticos preocupan a los entrevistados, aunque otros dicen, los sospechosos no deben salir y permanecer en sus hogares.
Aunque muchos no se quedan a acampar en las cabañas o en algún hotel, la visita en la sierra, aunque sea de unas horas, junto con un rato en familia y amigos olvida las cotidianidades de la semana.
Esta semana el Semáforo Estatal para la Reactivación, continúa en rojo, lo que significa que del 29 de junio al 5 de julio, las áreas de actividades físicas en espacios públicos al aire libre, seguirán inhabilitados.
