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sábado, abril 20, 2024

Grito feminista retumba en la capital, exigen justicia para Andrea

Guanajuato, Gto. Una vez más las calles de la capital del estado retumbaron con al grito de decenas de mujeres que exigieron justicia por Andrea, una joven capitalina que fue víctima de abuso sexual y cuyos agresores están en las calles.

Foto: Tere Segura.

Desde hace unos días se comenzó a convocar la marcha que comenzó en el Teatro Cervantes y culminó en la explanada de la Alhóndiga de Granaditas.

Todas atendieron la cita. El contingente de más de 50 mujeres se comenzó a concentrar al filo de las 5:00 de la tarde.

Todas cantaban consignas con gran energía, energía que nunca se perdió a pesar de algunos comentarios negativos de los mirones.

El Teatro Juárez, ese que ha sido escenario de varios movimientos y luchas, fue la primera parada donde las mujeres cantaron himnos feministas, como Canción sin miedo.

La marcha continuó y frente a Presidencia Municipal hicieron la segunda parada; ahí, Andrea, quien se encontraba entre el contingente, habló para narrar su experiencia y reclamar justicia.

Contó que la madrugada del pasado 7 de marzo fue abusada por dos hombres mientras ella estaba inconsciente; sus agresores Idrish David Dávila y Diego Kalef están libres.

“A Diego Kalef su familia lo ayudó a escapar del estado, primero lo escondieron en un anexo de Irapuato y luego lo llevaron a la Ciudad de México”.

Mencionó que por el abuso sexual ya se interpuso una denuncia ante el Ministerio Público, sin embargo, al momento no hay fecha de cuándo van a detener a quienes le robaron la tranquilidad, mientras sus familias están borrando sus rastros y señalándola como la provocadora.

“Mientras está pasando todo esto, están borrando su rastro y me están culpando diciendo que yo los provoque cuando tengo 15 años, y ellos 20 y 18, y yo estaba totalmente inconsciente. Están en libertad, no tengo conocimiento de cuándo van a ir por ellos, me da mucho coraje porque Idrish está diciendo que yo lo provoqué, que es mentira, cuando desperté me estaba intentando penetrar y fui al baño y tenía mis pantaletas llenas de sangre.

Si en algún lado pasan esto y me están viendo quiero decirles que los vamos a encontrar, y se van a pudrir en la cárcel y van a pagar lo que han hecho”.

Su denuncia pública terminó al grito de las mujeres que la rodeaban con un “Yo te creo hermana”, “No estás sola, yo te creo”.

Así, siguieron hasta las escalinatas de la Universidad de Guanajuato para recordar que la máxima casa de estudios también es la casa de algunos acosadores.

Su paso llegó hasta la Unidad de Atención Integral a las Mujeres, donde pintaron consignas de justicia y reclamo en los casos de mujeres que han sido víctimas de la violencia; después, en la explanada de la Alhóndiga de Granaditas todas se sentaron para escuchar otro himno feministas y con abrazos entre ellas terminó el día.

Foto: Tere Segura.

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