León, Gto. Desde 2009, la Terminal Metropolitana de León ha sido un punto clave en la movilidad de miles de habitantes de comunidades rurales y municipios aledaños, permitiéndoles desplazarse hacia la ciudad más grande del estado.
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Ubicada en la calle Leandro Valle, esquina con la avenida Miguel Alemán, la terminal es el punto de partida y llegada de líneas como Azules y Triángulos, Coordinados, Metropolitano y Flecha Amarilla. A diario, estas rutas conectan León con las localidades de Silao, Cuerámaro y San Francisco del Rincón.
Los usuarios frecuentes recuerdan con nostalgia la puesta en marcha de la terminal hace más de 16 años.
Durante este tiempo, han sido testigos de la renovación de algunas unidades, aunque otras continúan operando pese al desgaste.
Su construcción no solo ayudó a mejorar la movilidad en la zona, sino que también brindó mayor seguridad a los peatones y favoreció el comercio en el Centro Histórico, al descongestionar el tráfico de la avenida Miguel Alemán.
Actualmente, se planea su reubicación a la base de transferencia de Santa Rita, lo que permitirá integrar más rutas provenientes de los municipios del Rincón y Manuel Doblado.
Sin embargo, los usuarios entrevistados señalan que la terminal enfrenta problemáticas como aglomeraciones, retrasos y baja frecuencia de unidades.
“Es como cualquier otro paradero del transporte público, con los mismos problemas de siempre: camiones llenos, esperas largas y pocas corridas al día”, comentó uno de los pasajeros.
Los precios de los boletos en promedio va de los 23 pesos el ir a la comunidad de Los Sauces, en los límites de Silao y León; aunque a Silao está en 35 pesos; 64 a Cuerámaro; 30 a Jesús del Monte en San Francisco del Rincón; y 29 pesos a la Sandía, en León, aunque también hay beneficios para ciertos usuarios.
A pesar de estos desafíos, la Terminal Metropolitana sigue siendo un punto estratégico para quienes dependen del transporte público para su vida diaria.
