León, Gto. El presidente del Colegio Estatal de Abogados de Guanajuato, Jorge Marcelino Trejo, llamó a hacer un análisis exhaustivo sobre las diferentes gestiones al frente de la Universidad de Guanajuato. En específico, dijo que es preciso analizar el desempeño de Luis Felipe Guerrero Agripino, frente a las diversas denuncias que han realizado los estudiantes.
A seis días del paro estudiantil, con el que se ha protestado para exigir seguridad y justicia dentro y fuera de la máxima casa de estudios del estado, Trejo consideró que el movimiento tiene bases muy sólidas para ser tomado con la seriedad que se merece, sin observar alguna manipulación política o de grupo.
“Yo creo que se debe hacer un balance, una revisión a fondo, muy profunda. Reflexionar seriamente sobre todo lo que ha sucedió a lo largo de los últimos años, incluso desde que entró Agripino y un poco más atrás”, expresó el líder de los abogados.
Expuso que la sociedad se ha manifestado a través de diferentes medios sobre los problemas que se generan al interior de la universidad. No solamente alrededor y afuera, también al interior, con casos de abuso y acoso que han quedado sin castigar.
“Si en la balanza, el resultado es que ha habido abusos y falta de atención, yo creo que el resultado ahí está. Se necesitará hacer un cambio en la rectoría. No hay vuelta de hoja”, subrayó.
Coincidió en que ha habido omisiones y falta de atención por parte de la autoridad pública y universitaria.
“Ellos han venido expresándose, a través de las redes sociales, medios de comunicación. Han expresado su descontento, su inseguridad, su miedo al estar en la Universidad de Guanajuato, ante situaciones como abusos entre otras cosas más. No se ha atendido”.
Marcelino Trejo dijo esperar que esto sea el principio y fin de este mal capítulo, que la autoridad reconozca que hay fallas y que justo, derivado de eso, se corrija con urgencia.
“En los temas de acosos y hostigamiento sexual, hubo fallas muy graves. No debió cometerse la revictimización que muchas ocasiones ocurre en las agencias del Ministerio Público, donde pareciera que el ofendido se convierte en el que cometió el delito. Hay que analizarlos, verlo a fondo, donde se falla y que no vuelva a suceder”.
Agregó que aunque se diga fácil, se trata de cuidar el futuro de México.
“Luego porque nos quejamos de que los jóvenes se convierten en delincuentes o se suman a la delincuencia, cuando las autoridades no los escuchan y hay un desencanto total. No es justificación pero las fallas hay que atenderlas”, concluyó.
