León, Gto.-El Instituto Cultural de León (ICL) atraviesa por varios señalamientos. La renuncia del presidente del consejo directivo, Gabriel Pérez, así como dos quejas por hostigamiento laboral que derivaron en el despido de una de las víctimas.
Además, el síndico José Arturo Sánchez Castellanos, consideró que el titular de la paramunicipal, Mario Méndez, es “conflictivo” y la administración tendrá que poner orden al interior.
Denuncia y la despiden

Lizbeth Orozco Álvarez, hasta el pasado lunes directora de administración del ICL, denunció hostigamiento laboral ante la Procuraduría General de Derechos Humanos (Prodheg) por su superior, Mario Méndez Manrique, mismo que le notificó su despido bajo el argumento de una reestructura, pero a los integrantes del Consejo les dio otra razón.
“Él es el último que firma los contratos, cuando le mando unos, ya no me los quiere firmar; me llama a una junta y delante de la contralora interna me empieza a acusar y dice que me van a checar. Entrego facturas, entregables y en un dictamen por escrito, le dice que no hay irregularidades y que solo falta su firma”, contó Lizbeth a Zona Franca, este fue el primer desencuentro en abril pasado.
Orozco pidió el dictamen por escrito a la contralora interna de la paramunicipal, Estefanía Azoños a quien le cuestionó la verdadera intención de que sea investigada.
“Y yo le pregunto si lo que quiere es perjudicarme, y ella me dice que sí, y yo ahí me empiezo a proteger”, enfatizó.
Lizbeth tenía once años al interior del ICL, comenzando en la coordinación jurídica, luego en la secretaría particular y desde 2017 como directora de administración.
“Después empezó a tratarme mal, relegarme, quitarme atribuciones, él está haciendo pagos cuando no tiene las atribuciones, me quitó la facultad de firmar en las hojas donde está mi nombre. A mi me dijeron en derechos humanos que eso era violencia institucional y comenzó a dar instrucciones a mi equipo sin informarme”, narró Orozco.
El primer paso fue acercarse al Instituto Municipal de la Mujer, donde le dieron acompañamiento y el 22 de agosto decidió interponer la queja formal ante derechos humanos no solo contra Mario Méndez como titular, sino contra la contralora interna de la paramunicipal.
El pasado 02 de septiembre, el director fue notificado sobre la queja y el informe que tenía que enviar sobre los hechos. Tres días después, la directora decidió interponer una queja ante la Contraloría Municipal.
“Incluso en reuniones el expresidente me llegó a defender de Mario, y cuál fue la represalia, me reprobó en clima laboral. Después de once años, nunca había tenido conflictos, yo me deprimí mucho, me frustré , nunca había pasado por esto”, añadió la directora, quien está recibiendo acompañamiento psicológico también.
Este lunes 26 de septiembre, el director le notificó que el ICL decidió terminar su relación laboral por reestructura; sin embargo, en un correo enviado a los consejeros, al cual Zona Franca pudo acceder, les señala que su despido es derivado de irregularidades:
“El motivo de su baja se debe a que desde el 30 de mayo del presente este año solicité una revisión por parte de la Contraloría Interna por el pago de $942,274.00 (novecientos cuarenta y dos mil, doscientos setenta y cuatro pesos 00/100 M.N.) que fueron erogados sin mi consentimiento a través de transferencia bancaria y sin tener los contratos firmados por un servidor”, señala el director, contratos que de acuerdo con la víctima él mismo se negó a firmar.

De esta presunta investigación, la señalada no tiene ninguna notificaciones de la contraloría interna; sin embargo, su caso ya está en la contraloría de la administración centralizada y espera la resolución no solo del hostigamiento, sino de cualquier irregularidad de la que se le acusa.
Lizbeth se presentó a laboral este martes para firmar, pero este miércoles ya no acudió y hasta ahora no se le ha resuelto su liquidación.
Presidente se va por conflicto con titular

José Arturo Sánchez Castellanos, síndico del Ayuntamiento, reveló que una de las razones por las que Gabriel Pérez Navarro, renunciara a la presidencia del consejo directivo del ICL fue por choques con el director.
“Y me preocupa que un presidente renuncie, estoy enterado que este director es muy conflictivo, que poco ayuda a resolver la problemática. Es correcto, nunca hubo química precisamente porque el director es muy conflictivo”, señaló el síndico.
Además consideró inaceptable que Méndez haya decidió correr a la directora cuando hay una investigación en curso y después de ser denunciado por hostigamiento.

“Él no tiene facultades, no puede resolver la problemática corriendo si no hay dictamen y sería la contraloría quien solicitaría la destitución o reparación del daño”, enfatizó.
La presidenta Municipal, Alejandra Gutiérrez Campos, señaló que esperará a que la Contraloría emita una resolución; sin embargo hoy recibió a la víctima en su despacho.
Zona Franca solicitó al ICL alguna postura o entrevista con el funcionario municipal, pero señalaron que será hasta que la Contraloría interna de la paramunicipal, así como la Contraloría Municipal del gobierno de León, tengan una resolución al caso, cuando puedan emitir un postura.