Ciudad de México, (SinEmbargo). La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró definitivamente el delfinario Dolphinaris Barceló, operado por Acuario Arrecifal, S.A. de C.V., por irregularidades en el manejo de los ejemplares marinos, incluyendo prácticas que ponían en riesgo su bienestar.
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Entre las violaciones señaladas por la Profepa, destaca el trato indigno a los delfines, la realización de acrobacias sin autorización y la participación de ejemplares en espectáculos mientras se encontraban en tratamiento médico.

Un caso emblemático dentro de la investigación es el del delfín “Mincho”, quien, en noviembre de 2020, se impactó contra una plancha de concreto durante una acrobacia, lo que le generó lesiones graves en los ojos.
A pesar de que el veterinario había indicado 15 días de incapacidad, el delfinario lo reincorporó a actividades apenas dos días después. Además, las evaluaciones médicas periódicas que establece la Ley nunca se llevaron a cabo, afectando su recuperación.
Otro aspecto preocupante fue la falta de reporte sobre el incidente de “Mincho”, lo que contraviene la normativa sobre el manejo de especies en cautiverio.
La Profepa señaló que el recinto incumplió también con la regulación de temperatura del agua, algo que afectó la salud de los ejemplares.
“De acuerdo con las bitácoras del periodo en el que ‘Mincho’ se encontraba en este recinto, en diversas fechas se detectaron temperaturas superiores a 27°C, lo cual incumple con la normativa de manejo adecuado”, se lee en el comunicado.
También se detectó que en varias ocasiones se excedió el número de personas permitidas en las interacciones con los delfines, aumentando el estrés de los animales y exponiéndolos a condiciones inapropiadas
Además de la clausura, la Profepa impuso una multa de más de 7.5 millones de pesos y presentó una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR) contra quienes resulten responsables del daño a los mamíferos marinos.
Finalmente, la dependencia reiteró su compromiso de garantizar el trato digno a los ejemplares en cautiverio y subrayó que toda instalación con mamíferos marinos debe cumplir estrictamente con la normatividad vigente.