Irapuato, Gto. Cerca de 500 paquetes de juguetes fueron entregados a los niños, víctimas de violencia con motivo ‘Día de Reyes’. Los menores en su mayoría, hijos de padres desaparecidos, cuyas familias pertenecen al colectivo ‘A tu encuentro’.
Está colecta ‘Sembrando Sonrisas’ fu encabezada por la fundación ‘Sembrando Comunidad’, y fueron sus integrantes quienes realizaron la entrega de manera simultánea en los municipios de León, Celaya e Irapuato, Salamanca, Cortazar, Tarandacuao, Apaseos, Acámbaro, Pénjamo y Guanajuato capital.
La vocera del colectivo ‘A tu encuentro’, Bibiana Mendoza expuso que no querían dejar a los niños sin un juguete, pues ellos no se lo merecen y son los menos culpables de la violencia que hay en la entidad.
“Les hicimos una promesa a esos niños, un día que les vamos a regresar a mamá y a papá; pero en lo que eso pasa, queríamos regalarles, aunque sea una parte de esa carta, que es un juguete, porque todos pidieron: ‘queridos Reyes Magos me porte muy bien, regrésame a mi papá y aparte, si puedes me traes una muñeca”.
“Decidimos hacer ‘ Sembrando Sonrisas’ para regalarles un día de alegría a estos niños, que supieran que los Reyes Magos no se olvidan de ellos”.
Explicó que otros de los propósitos era hacer un llamado a la sociedad, para que se diera cuenta como queda fracturada una familia cuando hay un ser querido desaparecido.
“Cómo va a quedar una generación de niños y adolescentes fracturados a futuro, porque desgraciadamente desde el año 2017, 2018, que empezaron a desaparecer, están quedando muchos niños huérfanos, o ni siquiera huérfanos, porque cuando está desaparecido como consuelas a un niño, es algo diferente, no te deja avanzar”.
Bibiana dijo que la meta eran 150 juguetes, pero se logró obtener 500 paquetes.
Estimó que dentro del colectivo hay 350 niños, hijos de padres que han desaparecido. Sin embargo, apuntó solo se trata de las familias de ‘ A tu encuentro’, dado que hay más grupos y más desaparecidos en otros municipios de Guanajuato, algunos que no han siquiera denunciado.
Abuela agradece Reyes para sus nietos
“No tuve dinero para regalarles algo a mis nietos”, dijo María Teresa Marmolejo, quién tras la desaparición y muerte de su única hija, Dulce Alejandra, se quedó a cargo de dos niños, de 11 y 12 años de edad.
Fue en julio cuando los pequeños perdieron a su mamá, joven de 27 años que fue privada de la libertad junto a su pareja, cuando se encontraba en su domicilio de la colonia Santa Julia. Ella habría sido asesinada en cuatro días después del plagio y un mes y medio más tarde, supuestamente localizada sin vida entre Apaseo el Alto y Querétaro.
“Mi hija era padre y madre para mis nietos y ahora solo les quedo yo”.
María Teresa describió la desaparición de su hija como la situación más difícil que ha atravesado en su vida.
“Es desesperante no saber, fue un mes y medio angustiante, no saber donde estaba mi hija, en dónde podía encontrarla, si había comido o en qué condiciones estaba”.
A María Teresa nunca le dejaron ver el cuerpo de Dulce Alejandra, lo que, por momentos, le hace dudar de que haya sido ella, quien fue encontrada sin vida y piensa que podría volver.
Sigue con el colectivo, pues al igual que quienes han localizado a sus allegados desaparecidos, considera que el colectivo es una familia.
Aún reciben apoyo psicológico.
“Tengo dos angelitos que me dejo mi hija para salir adelante y sobrevivir gracias al colectivo”.
María Teresa refiere la FGE no ha dado avances de la investigación en torno al homicidio de su hija.
“A quién se le pide justicia, a nadie, nunca van a encontrar al culpable, nunca habrá un culpable”.
