Irapuato, Gto. “Seguro, se fue con el novio”, “seguro, se fue con otra”, “usted, ¿vio que se lo llevaron?”, “a lo mejor se escondió por miedo” son solo algunas de las frases que reciben quienes denuncian ante la Fiscalía General del Estado (FGE) la desaparición de sus familiares, que de entrada es clasificada como personas ‘No localizadas’, pese a que se de cuenta de que fueron llevados por la fuerza.
Y es que es el trato ‘degradante’, la falta de atención, de apoyo y omisión de información por parte de la Fiscalía son coincidencias en los testimonios de las víctimas indirectas, quienes buscan desesperadamente a su hijo, esposo, hermano, sobrino, nieto. Mediante una reunión, nueve familias mostraron su interés por formar un colectivo y hacerse escuchar en lo que será la Ley de Desaparición Forzada y la Ley de Víctimas.
Cabe destacar, que tan solo en Irapuato, desde el 2018 y en lo que va de este año, suman 63 personas desaparecidas. Se trata de 53 hombres y 10 mujeres, de las cuales dos son menores de edad y cuyas fotografías circulan en redes sociales. Pero, a ello, habría que añadir otros 24 casos, cuyas familias no denunciaron.
Una de las activistas y víctima indirecta de Desaparición Forzada, quien por seguridad omitió su nombre, dijo que la convocatoria hecha en Irapuato surgió tras una publicación en redes sociales hecha por la diputada local, Libia Denisse García.
“Ella comenta que están en proceso de dictaminar la Ley de Víctimas y de Desaparición Forzada, la cual no ha sido evaluada, o platicada incluso con las víctimas que somos todos nosotros. No hemos sido tomadas en cuenta para la evaluación de esa Ley y ya están con la urgencia de promulgarla para que aplique. Nos acompañan familias que vivimos y sufrimos esta situación de desaparición de sus familias” dijo.
Detalló que en esta publicación de la legisladora, hubo voces que se pronunciaron por no ser tomadas en cuenta en esta Ley, lo que derivo en una invitación hecha por la Libia García para reunirse, pero sin plantearse como se recabara las aportaciones hechas por los familiares de los desaparecidos en esta iniciativa.
“No estamos negados a no asistir, nos interesa, pero no tenemos en claro cómo sería. De estrada, queremos tener un parlamento abierto para que varios representantes de colectivos o víctimas de manera independiente se acerquen, comenten sus situaciones, sus propias vivencias porque es muy diferente cada caso, de Fiscalía a Fiscalía como te tratan, de ventanilla a ventanilla, dentro de la misma Fiscalía como te tratan, entonces recabar esas vivencias para engrosar o hacer una nueva ley que aplique a la realidad de los guanajuatenses” precisó.
La activista dijo que la intención es que la ley ayude y no que haya un bloqueo u obstaculice, sobre todo cuando no hay conocimiento legal para argumentar, por lo que se necesita que la Ley se defina con la experiencia de los familiares.
Hace más de un año, relató, que desapareció su hermano en Celaya, y es ella y su familia quienes cada semana buscan información del caso por parte de la fiscalía, pero en respuesta pueden pasar días o semanas para que les respondan. Detalló que no hay comunicación fluida con las autoridades, pese a que hay ‘protocolos’.
“Desde el recibimiento; el trámite del ADN; los tiempos; las diligencias que realizan los peritajes; la comunicación que no se da por cualquier detalle, hacía retroalimentar a la familia; obviamente lo que uno quiere es saber donde esta el pariente, el familiar desaparecido. Hay veces, a nosotros nos pasó, ni siquiera teníamos el por qué no tenían indicio para empezar a investigar”
Detalló que, en su caso, en principio se indagó si su hermano estaba relacionado con el crimen, pero al determinarse que no era así, fue hasta después de un año, que se estableció que había dos posibles hipótesis.
“Preguntaba ¿por qué desapareció mi hermano? No saben. Esta última fecha, ellos manejan dos indicios, que pudieron haber sido, entonces ya va avanzando, pero ya paso un año. Se dice que, pasando el año, se cierran expedientes y se empolvan. Que desilusión, se nos puede pasar la vida y nosotros vamos y hablamos, y cuanta gente no tiene esa posibilidad”
La mujer dijo que el objetivo es la creación del colectivo “A tu encuentro Irapuato”, lo que podría ayudar avanzar en los casos, que carecen de avance.
Con la intervención de activistas, defensores de Derechos Humanos y académicos, los familiares recibieron una asesoría, en la que se busca que su voz tenga eco en la Ley y para lo cual, pretenden acercarse al Congreso del Estado con un posicionamiento firmado en la que están de acuerdo en asistir a una reunión con los legisladores, siempre y cuando haya metodología a través de la cual se sumen aportaciones a la iniciativa.
Testimonios
Una de las asistentes, relató que su esposo fue privado de su libertad el pasado dos de noviembre mientras lavaba su camioneta, sujetos armados irrumpieron en el domicilio de la pareja. Al presentar la denuncia, el trato del personal de la Fiscalía fue indiferente. Y su denuncia se clasificó en ‘ No localzado’
“En primera instancia, el día que me presente que fue el mismo sábado, una hora después, me dijo la joven que me levantó la denuncia que a lo mejor mi esposo se había escondido porque le había dado miedo. Yo le comenté que cómo le iba a dar miedo e iba a dejar que hombres armados entraran a nuestra casa y que si había pasado tiempo todavía no aparecía” mencionó.
Señaló que fue hasta este lunes, que le hablaron para decirle que este jueves tenía cita en el Ministerio Púbico para ampliar declaración y tomar muestras genéticas.
“solo eso y no me han dicho más. No hay avance en la investigación” dijo.
Expuso que, al darse cuenta de la localización de personas sin vida, se ha acercado para ver si se trata de su familiar, pero en respuesta solo le comentan que no hay ningún cuerpo con rasgos y/o características físicas similares a las de su cónyuge.
Su denuncia no fue clasificada como privación ilegal de la libertad o desaparecido, sino ‘No localizado’
“Que cómo yo no vi que se lo llevaron no es un hecho de que se lo llevaron, pero entonces ‘¿Dónde está mi esposo? Que hagan justicia, que investiguen, que no digan que se fueron, se escondieron por miedo, que se fueron a otro lado, que realmente hay inseguridad con gente inocente, trabajadora y no hacen nada, les pido justicia, que nos escuchen”
Al igual que ella, otros testimonios dan cuenta de cuando han hallado fosas clandestinas, o ‘ restos humanos enterrados’ como los identifica la fiscalía, el acercamiento a las oficinas de la Fiscalía, su peregrinar a las oficinas de Celaya, Irapuato y otros municipios.
