Guanajuato. El infectólogo, Alejandro Macías, advirtió que la complejidad del virus sincitial respiratorio radica en su capacidad para evolucionar y adaptarse a los climas y a los seres humanos, por lo que en esta etapa invernal debe advertirse su capacidad de infección entre las infancias, principalmente entre bebés menores de un año.
“Es un maestro del escapismo porque circula en una gran cantidad de de variedades o claves que le permite reinfectar mucho, no necesita ya estar mutando como hace el virus de influenza o el virus de la Covid 19; este es un virus que circula en una gran cantidad de formas”, expuso el especialista.
Expuso que es tan infectante que se estima que los niños en el primer año de vida, cuando pasan su primera estación del virus que es en época de frío, tienen más o menos un 60 por ciento de probabilidades de infectarse. Ya sea la segunda estación de virus tienen más o menos ya un 90 por ciento de probabilidades de haberse infectado.
“Casi es seguro que te vas a infectar del virus sincitial respiratorio en la infancia y luego toda la vida porque nos están reinfectando y tradicionalmente se le consideraba un virus de invierno nada más y en eso hay una circulación al mismo tiempo, junto con el virus de influenza y el virus ahora de la Covid 19”.
Explicó que es un virus que se considera catarral, pero en más o menos el 20 a 30 por ciento de los niños están en condiciones de complicarse.
“Como grupos de riesgo son niños generalmente que tienen bajo peso y mientras más chiquitos es más el riesgo. Me refiero sobre todos los menores de un año, los que nacieron prematuros, los que tienen bajo peso, los que tienen malformaciones congénitas (…) están en un alto riesgo de que cuando tienen el virus se van a complicar seriamente con una bronquitis o una bronquiolitis”.
Indicó que se diagnostica clínicamente cuando hay una complicación que es relativamente fácil, pero cuando no puede ser nada más un cuadro de catarro puede ser escurrimiento nasal y el niño puede estar razonablemente, pero decíamos entre el 20% y, en el caso de los niños de alto riesgo, hasta el 50 por ciento se puede complicar.
