México. La reaparición del Gusano Barrenador de Ganado (GBG) en México podría tener consecuencias económicas graves para el país, alertó el infectólogo Alejandro Macías Hernández.
Aunque los casos en humanos serían esporádicos, el principal impacto será en la ganadería nacional debido a las restricciones comerciales que puede generar esta plaga.

“Es una muy mala noticia. El principal daño, al menos desde el punto de vista económico, será en la economía y la ganadería. Eso enciende las alarmas y evitará la exportación del ganado, particularmente a países como Estados Unidos y Canadá y lugares donde tengan eliminado el ganado barrenador”.
El especialista recordó que México había logrado erradicar la presencia del gusano barrenador, una larva de mosca que causa miasis, pero advirtió que su retorno complica el panorama.
“Se tendrán que restablecer los programas de erradicación de esa mosca que no son sencillos. Pueden incluir varios abordajes, desde los tradicionales con insecticidas hasta la liberación de adultos estériles de la mosca”, explicó.
Además, alertó sobre la complejidad del control sanitario en las zonas fronterizas.
“México puede hacer de su parte lo que le corresponda, pero estando ante la cercanía de los brotes que se encuentran en Centroamérica, va a ser un control muy difícil, sin duda”.
Primeros casos en humanos detectados en Chiapas
La Secretaría de Salud (SSA) confirmó los dos primeros casos humanos de miasis por Gusano Barrenador en México. Ambos se reportaron en el estado de Chiapas entre el 15 y el 25 de abril de 2025, según el Boletín Epidemiológico de la Semana 17.
Se trata de una mujer de 77 años, ama de casa y residente del municipio de Acacoyagua, quien tenía antecedentes de diabetes sin tratamiento. Ella convivió con una cabra y un becerro con “gusanera”.
El segundo caso es un hombre que fue mordido por un perro infectado.
También se reportó un caso en un caballo en Oaxaca, lo que confirma la circulación del parásito en animales en otras regiones del país.
Cierre informativo
La enfermedad es causada por la larva de la mosca Cochliomyia hominivorax, que deposita sus huevos en heridas abiertas en animales o personas, generando lesiones graves si no se trata a tiempo.
México había sido declarado libre del Gusano Barrenador hace más de dos décadas, gracias a un programa binacional con Estados Unidos que incluyó la liberación de moscas estériles.
Ahora, el reto vuelve a encender las alarmas sanitarias y económicas.
“No se espera una epidemia en humanos, más bien serán casos esporádicos”, puntualizó Macías.
Sin embargo, insistió en que el foco debe estar en el control y erradicación inmediata para evitar que la reaparición del parásito se traduzca en un golpe severo a la producción ganadera nacional.