Comonfort, Gto. Raquel llegó desde las 7:30 de la mañana, hacía aire frío y ahora, sentada en un resquicio de sombra para evitar los rayos del sol, espera tener la oportunidad de recibir la vacuna contra el COVID-19, pero como ella, hay al menos 250 personas más afuera de la clínica el IMSS en Comonfort.
Ella con 64 años de edad, es la menor de una familia de cinco hermanos y reconoce que varios miembros de su familia se contagiaron de coronavirus, por eso, confía que al recibir la vacuna quede protegida, por eso, espera paciente a que la fila avance.
La atención de las personas de la tercera edad comienza desde la 8:00 de la mañana a las 10:00 de la noche, cuando se cierre la atención, se entregan fichas y son los primeros en ser atendidos, después se sigue con quienes guardan la fila.
Manuel de 62 años, espera que la vacuna lo ayude a prevenir de enfermarse, demoró más de cinco horas formado para recibir la vacuna, y cuenta que por fortuna, ningún miembro de su familia aún se contagió del coronavirus.
Personal de las brigadas de “Bienestar” son quienes tratan de coordinar el proceso, no hay una lista de cuántas serán las personas que reciban la dosis, tampoco se tiene un censo del número de personas de la tercera edad, solo se tiene la indicación de aplicarla a cuanta persona llegue con su identificación para votar.
Cuando la persona va a ingresar, se registran sus datos, nombre, edad y domicilio, se pasa al área de vacunación y después la aplicación, debe esperar al menos 30 minutos, como una tolerancia para eliminar algún síntoma secundario.
Eso sí, sólo se aplica la vacuna a los habitantes de Comonfort, de ningún otro municipio por muy cercano que sea, dado que en la clínica del IMSS detectaron que pedían ser atendidos ciudadanos de Celaya y San Miguel Allende.
En Comonfort se habilitaron para aplicar la vacuna contra el COVID-19 en el Hospital Comunitario, IMSS Bienestar de Soria, UMAPS de Empalme Escobedo, UMAPS de Neutla y UMAPS de Landín, desde el pasado lunes y hasta el jueves, después se hará las visitas domiciliarias a pacientes que no pueden desplazarse por su edad o deficiencia física.
