San Miguel Allende Gto. El pasado martes 3 de septiembre, en instalaciones de la Dirección de Medio Ambiente y Sustentabilidad de San Miguel de Allende, se llevó a cabo una reunión con el director de dicha área Francisco Peyret y cinco representantes del grupo civil “Salvemos 41 Árboles” con el motivo de presentar la negativa al trasplante de árboles en el centro de la ciudad (Avenida Guadalupe), acción que se encontraría enmarcada dentro de un proyecto de mejoramiento sin especificar, en la zona.
En dicha reunión contó con la presencia de Lorena Patiño de la empresa EGEO Ambiental, quien en este caso fue presentada como especialista y asesora en tema de trasplante por la Dirección de Medio Ambiente.
Según lo expresado por ella aseguro “que si todo sale bien, únicamente – según estadísticas y estudios elaborados internacional y nacionalmente – morirán seis arboles de los 33 que se piensan trasplantar pues tres de ellos saldrían de la ecuación por motivos de salud y altura, entre otros. El porcentaje de probabilidades de que sobrevivan al trasplante es del 85%”, según su experiencia.
La pregunta que surge señalan los activistas : ¿Tienen que morir seis árboles sanos de 20 años de vida? Seis árboles que bajo nuestra perspectiva no deberían morir en ninguna circunstancia provocada por el hombre.
Señalan los inconformes que la cifra de 85% queda en entredicho después de que ellos tuvieron una entrevista con Vicente Yazbek, ecologista y jardinero con diplomados en Agroecología Sustentable y quien en el 2014 lideró el proyecto de recuperación de árboles nativos “Operación Huizache” además de colaborar con El Charco del Ingenio en el 2015 dando a conocer y poniendo en práctica técnicas efectivas para enfrentar las diversas plagas que amenazan y afectan a la vegetación local.
El especialista Yasbek manifestó que según su observación en el lugar, las raíces de dichos árboles estarían interconectadas y al momento de que uno no sobreviva los demás tampoco lo harán.
Continuando con la reunión, los ambientalistas detallan : “la Dirección de Medio Ambiente y Sustentabilidad de la ciudad trató de justificarse aduciendo que sus programas de reforestación están ayudando en la labor de proteger el equilibrio ecológico.
Desviaba de esta manera la atención del impacto mismo del proyecto de Obras Públicas. Este hecho queda patente en la expresión utilizada por la propia asesora Patiño al hablar de “compensación ecológica”.
Por definición el término compensación entraña daño o perjuicio. Sin considerar en ningún momento de la reunión siquiera la posibilidad de rectificar su postura e invalidar el proyecto, Ecología orientó su discurso hacia la colaboración con la sociedad civil para buscar soluciones viables para el trasplante, en un contexto de mejoramiento de la vía pública.
Misma dirección que manifestó no poder tomar otra acción diferente al trasplante ante
un proyecto ya aprobado por parte de Obras Públicas. “
Precisan también que en la reunión quedó claro que Ecología no tuvo ni tiene mayor injerencia en la toma de decisión de Obras Públicas y que en estos momentos únicamente está “reaccionando”.
Supone esto un llamado a la conciencia de la naturaleza en las mentes de nuestros
conciudadanos a través de la preservación de todos los pulmones de nuestra localidad.
“La Pachamama no es una Diosa externa. Es tu conciencia de la Naturaleza.” concluyeron los activistas.