León, Gto.– El Rastro de León trabaja con un tanque de escaldado que ya cumplió su vida útil y que actualmente representa un peligro para los trabajadores, pues es una herramienta que está activa seis días a la semana bajo condiciones de calor y presión.
Ante estas fallas, que han sido resueltas temporalmente por el personal de mantenimiento, la Dirección del Rastro Municipal solicitó a la Comisión de Salud una suficiencia presupuestal para renovar el equipo, que hoy en día es una bomba de tiempo.

El tanque de escaldado es una maquinaria especializada en la que se sumergen las aves sacrificadas, lo que ablanda la piel para que las plumas puedan ser retiradas con mayor facilidad.
El equipo actual, adquirido en 2017, ha presentado fallas constantes desde 2023 y ha requerido mantenimientos frecuentes, incluso con un dictamen de Protección Civil.
Una de las fallas más preocupantes para la coordinación del Rastro Municipal es la de la “tapa tortuga”, la cual protege la presión desde la caldera y, de fallar, podría causar graves afectaciones.

Asimismo, se ha detectado una falla en el sistema de amplitud de flama, que según la coordinación del rastro, detecta y responde ante situaciones anormales en el funcionamiento del tanque de escaldado.
Este tanque fue solicitado como una compra de emergencia para no poner en riesgo la vida de los trabajadores, ya que tiene 17 años de uso, además de que su modelo ya no cumple con las normas actuales.
“Actualmente, la caldera presenta fallas debido a los años de servicio. Según el dictamen de Protección Civil, podemos seguir utilizándola, pero manteniendo estrictas medidas de precaución”, señaló el director del Rastro, Juan José Bustamante Noriega.

De ocurrir un incidente con el tanque de escaldado, el Rastro Municipal prevé que este sucedería mientras está en funcionamiento y con la mayoría del personal presente.
Con información surgida en la Comisión de Salud de este jueves 12 de septiembre, la coordinación del Rastro Municipal está solicitando una suficiencia presupuestal de 820 mil pesos para evitar lo que podría ser una catástrofe.
“Después de la aprobación, el proveedor tiene hasta 45 días para la instalación. El objetivo es que una vez que salga el proceso de compra, se realice en el menor tiempo posible para empezar a utilizarlo”, dijo Bustamante Noriega.
Bustamante Noriega también indicó que en caso de aumento de temperatura, seguirán los protocolos de contingencia correspondientes.