León, Gto. En los juegos mecánicos de la Feria de León, puedes subirte con todo… menos miedo.
Así lo aseguran los visitantes que buscan emociones extremas y la adrenalina de las alturas.

Estos atractivos, que tienen costos de entre 70 y 90 pesos, no son para cualquiera.
Solo los más valientes se atreven a disfrutar la experiencia, tomarse fotos y grabar videos para sus redes sociales.
Ya sea para sentir el viento golpear tu cara mientras ves la ciudad desde lo alto o simplemente para una buena sacudida en las alturas, hay opciones para chicos y grandes.
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De acuerdo con David Espejel, director de comunicación de Grupo García, los juegos más buscados por los amantes de las emociones fuertes son:
Titán y Colossus – Torres de caída libre que desafían el vértigo. En Titán, los pasajeros ascienden 60 metros mientras los asientos giran como durante la caída.
The King – Un péndulo que se eleva más de 30 metros, poniendo a prueba el valor de quienes suben.
Roto Techno – Un reto para quienes buscan giros y velocidad extrema.
Space X – Una montaña rusa que cumple con las expectativas de los fanáticos de las emociones fuertes.

“Claro que me gusta subirme, me encanta la adrenalina, aunque sí te asustas cuando ves accidentes en ferias. Pero en general, todo es muy seguro”, comentó un visitante.
Otro, con un toque de humor, señaló: “Acabo de almorzar, eso me da más miedo porque puedo vomitar, que subirme a los juegos”.
El aumento del ritmo cardiaco, la respiración acelerada y la dilatación de las pupilas son parte del cóctel de sensaciones que generan estos juegos mecánicos, brindando bienestar y satisfacción a los asistentes.
Sin embargo, las autoridades y operadoras recuerdan que hay restricciones para: personas con problemas de espalda o cardiacos; mujeres embarazadas; quienes usen ropa holgada, gorras o sombreros; y personas bajo el influjo de alcohol o drogas.

También recomiendan mantener manos y pies dentro de las estructuras para evitar accidentes.
Al final del día, los juegos mecánicos de la Feria de León siguen siendo un imán para quienes buscan emociones extremas y una dosis de adrenalina en cada vuelta, caída o giro.