Guanajuato. Los robos con violencia en ciclovías de León son muy recurrentes y poco seguidos por la autoridad. Las víctimas optan por no denunciar ante los engorrosos trámites y optan por hacer investigaciones propias que les han llevado a comprar sus bicis robadas en tiendas de empeño o tianguis.
La organización Ciclismo Clásico en León al menos registra hasta tres reportes de robos que llegan a su página de Facebook y otras redes sociales. Ellos hacen una labor de difusión para que los ciclistas puedan recuperar su bici.
Aunque la cifra anual tan solo de los reportes recibidos puede sumar más de 30, ellos estiman que es ínfima a la cifra real, pues mucha gente no denuncia.
“Estamos enterados porque nos llegan reportes de asaltos a ciclistas en ciclovías. Los despojan de la bicicleta y de sus pertenecías”.
La organización expone que los asaltos son más frecuentes en las ciclovías que se encuentran sobre los camellones de avenidas como el bulevar Morelos, Juan Alonso de Torres, Hidalgo, La Luz y Juan José Torres Landa.
“Es donde más los ciclistas sufren asaltos porque esas ciclovías están ocultas y están muy escondidas, pasan entre puentes vehiculares y hay mucho arbolado y sirve de escondite de los asaltantes”, señalaron.
Ciclismo Clásico observó que generalmente los asaltantes son dos y salen entre los arbustos y los puentes. Un asaltante sale por el frente y otro por atrás y acorralan al ciclista lo asaltan con armas de fuego o armas blancas.
“Son dos personas, uno le quita la bici a la víctima y se va en ella y el otro ya trae otro vehículo o otra bicicleta. Sí suelen ser asaltos con violencia. La mayoría de la gente no denuncia, pues se sabe que es un trámite muy burocrático y lento. Sobre todo que para levantar la denuncia piden factura y la mayoría de la gente tiene bicis que les regalaron o que compraron por Internet. Por eso las víctimas hacen su propia investigación”.
La organización contó que de las investigaciones que hacen la víctimas, logran encontrar sus bicicletas robadas en casas de empeño y tianguis, y al final la tienen que comprar de nuevo.
