León, Gto. Desde hace un año, habitantes que transitan sobre el río que se ubica sobre los cruces del Tajo de Santa Ana y la avenida Olímpica, piden que se les rehabilite el puente San Nicolás para evitar ser arrastrados en sus vehículos por la corriente y sufrir afectaciones durante la temporada de lluvias.
Basta dar un recorrido para encontrar señalética vandalizada con grafiti que advierte sobre los peligros del río cuando la corriente sube durante la temporada de lluvias que fue colocada hace 12 meses.
El lugar mencionado se ubica en los límites de las colonias San Juan y Villa de Barceló y es una vialidad que permite a los habitantes de esta zona desplazarse hacia el bulevar Aeropuerto y sus alrededores de la zona oriente de la ciudad.
“Durante la temporada de lluvias aquí se vuelve intransitable, las camionetas se quedan varadas y los autos son arrastrados, en ocasiones tienen que venir las autoridades para rescatar a las personas”, opinó Arturo, vendedor de comida de la zona.
Los entrevistados señalaron que un puente de metal es el vínculo que permite a peatones, ciclistas y motociclistas ir de las colonias mencionadas cruzar cuando la corriente va muy fuerte.
“Solo está el puente de metal que colocaron hace un año, cuando comiencen las lluvias y el río arrastre agua se van a ver los problemas, principalmente los automovilistas que se verán obligados a buscar rutas alternas largas para un tramo relativamente corto”, opinó Martha, vecina del lugar.
Exceso de basura
Por su parte habitantes que transitan por dicho cruce expresaron su preocupación al denunciar que sobre tramos del cauce del arroyo hay un exceso de basura que durante las lluvias podrían ser arrastrada, tapar coladeras y provocar inundaciones.
Vecinos opinaron que el despoblado pero transitado lugar es utilizado por unos cuantos como basurero público en donde resalta el olor a restos echados a perder y el paisaje es opacado por los desechos inorgánicos que están tirados.
“Hay llantas enterradas en el cauce del río, hay gente que lanza su basura y la deja aventada a un costado del río, hay animales muertos, muebles, restos de electrodomésticos, cuando llueva la basura será arrastrada hasta lugares donde puede desbordar o taponear el río”, mencionó Joaquín, habitante de San Juan.
A pesar de que hay servicio de recolección de basura en las colonias de los alrededores, hay personas que prefieren demostrar su falta de cultura tirando basura sin pensar en sus consecuencias, coincidieron los entrevistados.
Entre las mejoras solicitadas que hacen falta en la vialidad se encuentra la instalación de alumbrado público ya que pasada la noche, ver transeúntes y automovilistas es común a pesar de lo oscuro que se encuentre.
Y lugar de hechos delictivos
Además de ser un lugar propenso a sufrir afectaciones durante la temporada de lluvias, los habitantes que pasan por Tajo de Santa Ana y avenida Olímpica, deben de lidiar con los hallazgos de cuerpos asesinados.
El pasado 24 de mayo en dichos límites de las colonias San Juan y Villas de Barceló, localizaron el cuerpo semicalcinado de un hombre que murió de una asfixia por sofocación y que hasta la fecha nadie sabe quién es debido a que no ha sido identificado.
Los restos de cinta amarilla con la leyenda precaución a días del homicidio lucen colgadas de algunos postes y árboles, sin embargo cuando el río es cerrado debido a que lleva corriente es común encontrar estas advertencias para que los ciudadanos no arriesguen su vida.
No obstante los caminos aledaños para cruzar esta zona están disponibles, aunque no son muy seguros, a decir de los vecinos, ya que en cualquier momento un malhechor puede aprovechar la ocasión y asaltar a los transeúntes.
