León, Guanajuato.-Como un peligro latente de subida y bajada a diario, vecinos y comerciantes de la colonia Las Mandarinas, tienen que vivir con el riego de que en cualquier momento pudiera ocurrir una desgracia que se puede evitar.
Lo prolongado de la subida del bulevar Cereza en la colonia Las Mandarinas, y su bajada hacia el bulevar Saavedra, ha sido y seguirá siendo escenario de aparatosos accidentes, si no se toman las debidas precauciones.
A diario transitan cientos de vehículos en esta zona, así como camionetas y transportes pesados, personal de carga, motocicletas, bicicletas y los más osados van a pie tanto de subida, como de bajada.
Algunos vecinos han tendido que tomar medidas extremas o drásticas como el reforzar sus paredes, señalamientos en banquetas, esperar a que los topes desgastados funcionen y que las autoridades o Policía Vial haga algo antes de que ocurra un percance.
Los habitantes de la zona señalan que la vialidad siempre ha sido utilizada, pues es la bajada a la salida con el bulevar Juan José Torres Landa y una conexión rápida con el poniente de la ciudad, además que su tránsito aumentó con la llegada de la clínica 56 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) hace 13 años.
Para Polo, quien tiene desde la llegada de la clínica vendiendo periódicos y revistas a los visitantes de la institución, además de ser testigo de muchos accidentes, los topes que colocaron en la subida y bajada fueron a raíz de la inauguración del nosocomio.
“Antes de la llegada DEl ‘Seguro’ (IMSS) no había topes, ni de bajada ni de subida, hace unos años lo pusieron, porque bajan con todo los carros y en la subida se quedan atorados; camión que sube cargado; no sube”, DIJO.
Agregó que en las primeras semanas en que abrió la clínica, incluso uno de los doctores atropelló a una persona que iba pasando.
En eventos fuertes que pudieron ocasionar una tragedia sobre el bulevar Cereza, hubo uno que quedó en congestionamiento vial, daños materiales a una vivienda y un tortón volcado, el pasado 3 de septiembre del año 2021.
Durante el accidente, más de 200 litros de diésel quedaron derramados sobre la vialidad, luego de que la pesada unidad se quedara sin frenos y para evitar una tragedia, se impactó contra el pórtico de una vivienda en la esquina de la calle Tangerina.
Esa ocasión el conductor era Francisco, quien declaró a Zona Franca que al ir de bajada, los pedales de los frenos no le respondieron, se patinaron las llantas y terminaron destruyendo parte de un pórtico que en ese entonces era una purificadora de agua.
“HaN sido varios accidentes los que han pasado de bajada y de subida, bajaron con los topes pero la gente no entiende, las autoridades no hacen nada y hasta que no ocurra una desgracia van a venir a poner orden”, indicó Fátima vecina de la colonia Las Mandarinas.
Entre las peticiones de los vecinos y locatarios de la zona que hacen a las autoridades del municipio, está sin duda la presencia de la Policía Vial, así como modificaciones, prohibiciones y señalética en el bulevar Cereza.
