El nombre genérico, simplemente es calle. Pero existe una enorme variedad de términos para identificarlas por sus particularidades: avenida, bulevar, calzada, camino, calle, callejón, eje, circuito, paseo, etc. Presumiblemente, existe una razón específica para nombrarlas. Sin embargo, en muchas localidades parecen desconocerla, pues arbitrariamente nos topamos con avenidas y bulevares; calles y calzadas; privadas y callejones, sin que medie un criterio para su diferenciación.
Antes de abordar sus particularidades, la Ortografía nos informa que estas palabras son sustantivos comunes. Esto se refiere a nombres no propios. La denominación bulevar López Mateos indica que ese tipo de calle lleva por nombre el del expresidente. Por tanto, la palabra bulevar no es parte del nombre propio, solo indica el tipo de calle. Por ello, debe ser escrita con inicial minúscula, si no le corresponde la mayúscula (al iniciar párrafo o después de punto y seguido). El dato parecería nimio, de no ser porque muchos documentos oficiales incluida la credencial para votar presentan faltas ortográficas por no considerar esa norma. El sector público debe cuidar estos aspectos pues confunden a la sociedad. En Irapuato de la colonia Las *Reynas hace que los niños duden en cómo se escribe esa palabra. Por otra parte, algunos municipios parecen no haberse percatado que la voz bulevar ya se castellanizó hace más de 30 años. En las placas de identificación de muchas de estas calles, aún persiste la forma francesa boulevard.
Calle es el concepto genérico y se refiere al camino, senda o vía entre edificios, solares, árboles o plantas, no necesariamente pavimentado. Para avenida aplica la misma definición, pero se caracteriza por ser vía ancha; coloquialmente, se usa para designar las calles de poblaciones grandes que contienen circulación con ambos sentidos y que para señalar su diferencia, en la parte media tiene una acera, llamada popularmente camellón. El bulevar es similar a la avenida, pero el diccionario registra que le diferencia es el arbolado. En tanto, paseo debe ser una avenida con aceras arboladas, anchas, con espacios para plantas y pasto, que permita el cómodo tránsito peatonal, aunque no necesariamente el vehicular. Calzada, por otra parte, el diccionario oficial la define como la parte de la calle comprendida entre las aceras; debe ser ancha y estar pavimentada. El origen de esta palabra procede del latín vulgar y los romanos la usaban para designar los caminos extensos que comunicaban a Roma con el resto de sus dominios.
Modernamente, se ha empezado a llamar ejes a grandes avenidas, tanto en lo ancho como en longitud. Pero la definición en el diccionario no corresponde al uso vial: «Línea que divide por la mitad el ancho de una calle o camino, u otra cosa semejante (…); Cosa considerada como el centro de algo, y en torno a la cual gira lo demás». Por esta lógica, los ejes debieran cruzar la ciudad para volverse los distribuidores principales del flujo vehicular. Sin embargo, en varias ciudades así han sido llamadas las calles que evitan la ciudad. De callejón es sinónimo de callejuela y no necesariamente sin salida. Ojalá que con estos conceptos ya no se tome tan arbitrariamente su designación.
