León, Gto. Para el presidente del Colegio Estatal de Abogados de Guanajuato, Jorge Marcelino Trejo, la cifra de agentes policiacos asesinados o fallecidos en su labor es alarmante, pues si se suman los agentes desde el año pasado a la fecha, el número es casi el 10 por ciento de lo que representa la corporación leonesa.
Con el fallecimiento de un policía en León el fin de semana pasado, al tratar de evitar un asalto a una empresa de tractocamiones, ya suman 49 los elementos asesinados en lo que va del 2019. Estos sumados a los 63 de todo el 2018, serían 112 finados en poco más de 23 meses.
“Yo creo que eso demuestra falta de preparación, falta de capacitación, quizás el protocolo no se está cumpliendo pero sobre todo, la responsabilidad que tienen a su cargo los secretarios de seguridad en cada municipio, en el caso de León, donde se demuestra que hay fallas y si hay fallas quiere decir que las cosas no están funcionando”, opinó Marcelino Trejo.
Expuso que no se puede estar arriesgando a un ciudadano que se convierte en un policía, que quiere dar su vida y trabajo por la ciudadanía, “que lo llevemos a la calle con los brazos abajo y con el riesgo de que no pueda regresar a su casa y regresar muerto. Eso es muy triste para las familias, para la
ciudadanía”.
Dijo que aunque pareciera que hay coordinación, los resultados demuestran lo contrario, pues desgraciadamente algo está fallando y se está llevando la vida de los policías. Circunstancia que, puntualizó, debe ser explicada.
“Esto es simple y sencillamente el significado de una anarquía de la delincuencia y de una falta de capacidad del gobierno, para generar un resultado. Vamos a buscar que la autoridad, pues ya no decir que se ponga las pilas, que cumpla con los objetivos y haga las cosas correctamente”.
Cuestionado sobre la desconfianza en los agentes, el líder del colegio de abogados sostuvo que la confianza no genera seguridad.
“Lo que debemos de hacer es, ante el rebase de la autoridad y cuerpos de policía por parte de la delincuencia, claro que la ciudadanía tiene que de alguna manera auto protegerse, autovigilarse, que realmente no es una función del ciudadano, esto es como y derivado de una falta de seguridad”.
Ante todo, sentenció que si el estado generara la seguridad adecuada y necesaria, simple y sencillamente no pasaría nada. “Hay que colaborar y participar, bueno, lo hacemos por bien de nosotros, pero que la autoridad entienda que es derivado de la falta de resultados de ellos”.
