León, Gto. A tres años del trágico accidente de la ruta 84 de Loma Dorada que cobró la vida de al menos 11 personas y que dejó con graves lesiones a decenas más, cuando bajaba por el bulevar Paseo de la Cima, rumbo al bulevar Las Joyas, los estragos por las discapacidades de los sobrevivientes y los temores en los usuarios del transporte público, prevalecen como si todo esto hubiera sido ayer.
En esa barranca, durante meses las cruces de madera, veladoras, adornos florales y hasta los asientos y otras piezas del camión urbano, quedaron asentadas en un pequeño cementerio donde a más de un leonés al pasar por la empinada pendiente se le hace un nudo en la garganta.
Tan solo las modificaciones en dicha vialidad forman parte de los recuerdos que pasan los familiares de las personas fallecidas, pues el fondo del barranco donde volcó el descontrolado camión aquella noche del 29 de diciembre de 2018, ya se encuentra remodelado con el fin de evitar un accidente similar.
Aquella fecha, eran las 21:06 horas cuando el chófer del camión LE-306E de la estación catorceava, perdió el control de la pesada unidad y se precipitó hacia el fondo de un barranco.
Entre las víctimas de este mortal accidente de tránsito se encuentran el chófer del camión, quien salió proyectado junto con otros pasajeros y una mujer embarazada.
Aparentemente el exceso de velocidad y fallas mecánicas que dejaron sin frenos al camión, fueron factores que estuvieron de por medio aquella trágica noche que sigue marcando de dolor a los leoneses.
Esta ruta arrancó operaciones desde finales de marzo del año 2017 y fue implementada para cubrir la demanda de 25 mil usuarios de Las Joyas-Loma Dorada-Centro-Reforma y reducir tiempos de traslados al evitar abordar a la estación de transferencia de San Juan Bosco.
Sin embargo, los usuarios que con frecuencia viajan en esta ruta, saben el peligro al que se enfrentan porque saben que las fallas mecánicas pueden ocurrir en cualquier momento, por lo que el mal estado de las unidades son quejas que persisten.
*Desde la volcadura, nada es lo mismo*
Para Iván Azpeitia Mendoza, un joven de 26 años de edad, desde que sufrió la volcadura no fue el mismo ya que hasta la fecha los estragos siguen en su cuerpo ya que todavía no puede caminar bien.
Su madre, la señora Juana, encargada de los cuidados de su hijo, cuenta que ‘bendito sea Dios’ Iván salió adelante de las operaciones que le hicieron en diferentes hospitales.
“Lo intervinieron quirúrgicamente para ver si podía volver a caminar pero no. Siguió igual, trata de moverse y de dar pasos pero sus pies ya no le ayudan mucho”, contó durante entrevista con Zona Franca Noticias.
Conforme siguieron las terapias de rehabilitación, la vida se les ha hecho muy difícil ya que solo queda el asimilar que tras el accidente nada ha sido lo mismo y que cada día a pesar de los intentos por salir adelante, todo indica que Iván mantendrá una discapacidad.
La mamá del joven accidentado, cuenta que las indemnizaciones a las víctimas y los apoyos a los sobrevivientes, se cumplieron a final de cuentas, aunque anímicamente se ha sentido muy mal durante los últimos meses.
“Todavía Iván sigue mal porque sigue con la impotencia de que quiere hacer sus cosas él solo, es muy difícil que al levantarse siga ahí mismo, él lo que más desea es trabajar, desgraciadamente es muy difícil que le den empleo a personas discapacitadas”, comenta Juana Mendoza.
La también usuaria de esta ruta de transporte, cuenta que ha pasado por el lugar y ha visto que ya se encuentra más protegido, aunque las secuelas del accidente las vive en su propio hogar al integrar a su vida los cuidados de su hijo.
“Gracias a Dios él sigue bien pero desgraciadamente por el accidente que pasó no solo mi hijo sino otras personas que tuvieron secuelas y bien que mal todavía siguen adelante y deseando que así sea”, finalizó la madre de Iván.