- Publicidad -
martes, abril 23, 2024

El libramiento norponiente de Guanajuato, una discusión pendiente.

La ejecución de una etapa más de la obra del libramiento norponiente en la capital del estado, con la finalidad de desviar el tráfico proveniente o con destino hacia Dolores Hidalgo y la zona norte del estado, ha abierto dos temas en los que una parte de la sociedad demanda ser escuchada.
Por un lado surge el tema de la obra y su justificación, la cual ha sido fuertemente cuestionada y lamentablemente poco aclarada por cada una de las autoridades que intervienen directa o indirectamente en la misma; por otro lado está el relativo a la preservación del “El Orito”, una área natural protegida por el municipio en la categoría de parque ecológico y que será atravesado por dicha carretera, según el proyecto de que se dispone.
Diversos ciudadanos y asociaciones se han reunido con la diputada federal Ruth Lugo y tanto a ella, como a través de los mecanismos de legales han requerido de la información relativa al proyecto, a la ejecución de la obra y a los estudios de impacto ambiental correspondientes, entre otras muchas cosas. Los resultados lamentablemente han sido respuestas incompletas, contradictorias y enormes silencios, según lo consignan ellos mismos en diversas notas periodísticas.
Sin duda una inversión como la que se pretende, de aproximadamente 650 millones de pesos, es importante para el municipio, pero no lo es menos la participación de la sociedad en el debate y la toma de decisiones en este tipo de obras y de inversiones.
Me referiré en esta ocasión a dos de los cuestionamientos que me parecen más relevantes:
Se ha pedido que las autoridades informen sobre las razones que los han llevado a considerar necesaria esta obra, entre ellas el aforo vehicular y la forma de determinarlo.
Se ha requerido de los estudios de impacto ambiental para determinar como es que la obra afectaría la parte de “El Orito”, esta área natural protegida, cuyo apego al decreto que la crea parecería más que suficiente para no autorizar una obra de ese tipo en dicho parque.
No deja de ser lamentable que respecto a “El Orito”, que suponíamos que ya había quedado legal y suficientemente protegido, al ser declarado área natural por el gobierno municipal, ahora se ciernan riesgos importantes derivados del paso de una carretera, y no haya autoridad que la defienda.
Es urgente que los gobiernos municipal, estatal y federal tengan la misma información sobre este proyecto y la obra que se está llevando a cabo, pero lo es más que decidan compartir y debatir esa información con la sociedad.
Las obras no son buenas, ni se legitiman, sólo porque las hace el gobierno, o porque traen inversión al municipio, lo son por el beneficio social que representan, por ello la sociedad requiere que se le garanticen espacios para opinar y debatir sobre cada una.
El debate puede ser una oportunidad para que aprendamos todos, gobierno y sociedad. Por lo que se ve, una vez más la sociedad está lista para hacerlo en cuanto tenga la información necesaria que las autoridades nos niegan, falta ver si los diferentes niveles de gobierno están dispuestos a correr el riesgo.

ÚLTIMAS NOTICIAS

ÚLTIMAS NOTICIAS

LO MÁS LEÍDO