Con el cese de José López Araiza Alday de la Dirección de Medio Ambiente Sustentable, la tarde de este jueves, el gobierno encabezado por el alcalde Ricardo Sheffield ha despedido a más de diez funcionarios de alto nivel en casi dos años.
Es en la Secretaría de Seguridad Pública en donde más cambios se han dado. Todo empezó con el nombramiento de la Mayor del Ejército Mexicano, María Guadalupe Anguiano Sánchez como titular de la SSP.
En aquel entonces el subsecretario de Seguridad era el coronel en retiro del Ejército Mexicano, Rodolfo Riviello, quien después de siete semanas en el cargo fue relevado por Benjamín Arturo Navarrete Ruiseco.
Posteriormente, Navarrete Ruiseco también fue relevado y se contrató al capitán Javier Barros Guasso como subsecretario de Operaciones.
Tanto Anguiano Sánchez como Barros Guasso, salieron de la administración municipal en medio de la polémica, la última cuando realizaron una detención en donde públicamente exhibieron a cuatro personas como los responsables de un robo a una vivienda, y que después fue demostrada su inocencia.
Por este asunto, recibieron recomendaciones de la Procuraduría de Derechos Humanos de Guanajuato, y tras esto, y alegando una reestructura a la SSP, el alcalde Ricardo Sheffield dio de baja a ambos funcionarios.
A la par, también dio de baja al Teniente Francisco Javier Martínez Espinosa, quien se desempeñaba como director de la Policía Municipal. Su cargo fue ocupado por Juan Manuel Portillo Guevara.
Sin embargo, no sólo en los cargos de secretario y subsecretarios se dieron cambios. En las direcciones de Prevención y Estadística y en la Central de Emergencias también se han suscitado despidos.
En el caso de la Central de Emergencias 066 se reportaron los cambios de Pablo Serrano, Felipe Ríos, quien sólo estuvo algunas horas como encargado de despacho, después se dio la llegada de Noel Natera Cordero y posteriormente Jorge García, quien actualmente se desempeña en el cargo.
Otros despidos polémicos
En direcciones como las de Comercio, y organismos como el Instituto Municipal de la Vivienda (Imuvi), y el Instituto Municipal de la Mujer (IMM), también se dieron ceses polémicos.
En el caso de Comercio, cuyo titular era Edgar Sánchez Orozco, la Contraloría detectó una serie de irregularidades administrativas y financieras, por lo que incluso dictó su inhabilitación como servidor público.
Además, el ex funcionario era acusado por líderes comerciantes de tener una actitud déspota y prepotente; finalmente y aunque después intentó regresar a su cargo casi a la fuerza, fue notificado oficialmente de su cese.
En el caso del Imuvi, donde el titular era Juan Pablo Luna Becerra, Sheffield aseguró que era la peor área de su administración, y que era un foco rojo, pues el rezago en entrega de escrituras era histórico; después de algunas semanas, el consejo del instituto determinó cesar al ex funcionario.
En tanto, Teresa Zorrilla, ex directora del IMM, fue cesada de su cargo hace tres semanas debido a que, según integrantes del consejo, no tenía comunicación con ellos; el alcalde Ricardo Sheffield dijo respetar la decisión y señaló que hubiera esperado más apertura y comunicación de parte de la ex funcionaria con su equipo de trabajo.
