MÉXICO, D.F. La noche del miércoles, Televisa difundió en sus noticieros que las camionetas con sus logotipos que fueron detenidas en Nicaragua con 9.2 millones de dólares, fueron registradas con papeles falsos para hacerlas pasar por propiedad de la empresa ante la Secretaría de Transporte y Vialidad.
El conductor de noticiero, Joaquín López Dóriga, argumentó que la empresa compra sus vehículos directamente a las compañías armadoras y no a las distribuidoras, en este caso de Jalisco y Guanajuato, donde según sus registros fueron adquiridas dichas unidades.
Según la televisora, 5 de los 6 vehículos fueron comprados en el 2009, 2010 y 2011, en León, Guanajuato, y uno más fue adquirido en Guadalajara, Jalisco; todas las facturas de las compras están a nombre de la líder de los detenidos, Raquel Alatorre Correa, quien “jamás ha prestado servicio alguno” a la televisora.
Un mes después de la detención de los impostores, la empresa explicó que su registro de parque vehicular lo hace a través de un gestor, a quien le otorga un poder; supuestamente el fraude se hizo presentando una copia de uno de esos poderes expedido en el 2003, originalmente, con una vigencia de 2 años.
