El subsecretario de Ayuda a Grupos Vulnerables de la Sedeshu, Luis Vargas, urgió al gobernador del estado, Juan Manuel Oliva, y al procurador de Justicia, Carlos Zamarripa, a exigir a la PGR agilice el trabajo de identificación de cadáveres encontrados en fosas clandestinas de Tamaulipas, pues asegura que aún quedan muchos guanajuatenses por ubicar.
Han pasado más de dos meses en que guanajuatenses que viajaban rumbo al estado de Tamaulipas desaparecieron, desde entonces, solo siete de ellos han sido localizados, todos muertos y enterrados en fosas clandestinas. Sin embargo, aún se acumulan más de 60 denuncias ante el Ministerio Público, donde familias esperan poder encontrarlos.
Luis Vargas, de la Secretaría de Desarrollo Social y Humano (Sedeshu), urgió a las autoridades del estado a hacer presión a la federación, en este caso a la PGR, para que se agilice el proceso de identificación de cadáveres, para conocer si entre ellos hay guanajuatenses.
“Están tardando en darnos esos resultados, estamos ya 2,3 meses de lo de San Fernando y las sesenta y tantas denuncias que tenemos de los guanajuatenses desaparecidos, nomas le hemos restado 7,8 que han identificado”.
Indicó que otro problema al que se enfrentan las familias de los desaparecidos, son las carencias económicas, pues las víctimas representaban el sustento familiar; sin embargo, la Sedeshu ha otorgado despensas, becas e incluso casas DIFerentes a los afectados a fin de paliar el problema.
Por ahora, se mantienen reuniones con las familias de los guanajuatenses desaparecidos, a fin de conocer sus situaciones y poder brindar apoyos económicos o sicológicos, según sea la necesidad; sin embargo, el principal problema radica en descartar o afirmar que entre los cadáveres que aún restan por identificar estén los de algunos guanajuatenses.
