La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) cuestionó la nula intervención de la policía preventiva de Celaya durante los operativos que se desplegaron en la ciudad tras ser baleado un local de comida en pleno centro histórico, donde murieran un policía ministerial y dos civiles.
De hecho, desde la tarde de este miércoles, se convocó a una reunión al más alto nivel de gobierno para analizasr el caso Celaya y los hechos que se han registrado no sólo en las últimas horas, sino desde que inició la actual administración.
Según declaró el Secretario Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Juan Miguel Alcántara Soria en días pasados durante un evento en la ciudad de León, el crimen organizado entra a Guanajuato por Celaya.
Ante esa circunstancia, la tarde noche del miércoles sostuvieron una reunión en las instalaciones de la Subprocuraduría General de Justicia del Estado de Guanajuato, la alcaldesa Rubí Laura Lara López, el Secretario de Gobierno, Héctor López Santillana, el Procurador General de Justicia del estado de Guanajuato, Carlos Zamarripa Aguirre, el Subsecretario de Seguridad Pública estatal, Pablo Sánchez Urbina, varios subsecretarios y subprocuradores y autoridades castrenses.
En ese marco, se puso en calidad de presentado al director de la Policía Municipal, Juan Martín Rodríguez Olvera, pues durante los operativos, donde participaron Fuerzas del Estado, Policía Ministerial y el Ejército Nacional, jamás hubo presencia de los elementos municipales, pese a que el ataque se dio a una cuadra de la jefatura policíaca de Celaya.
Aunque no se ha informado lo que ha declarado ante el Ministerio Publico el jefe de la Policía, la PGJE ha cuestionado la nula participación en el operativo, “causando extrañeza que en el despliegue policíaco realizado estuvo ausente la participación de la Policía Municipal de esta ciudad, al inicio, y fue presente en diferentes puntos hasta que fue expresamente requerido por la autoridad estatal”, indicó el procurador Carlos Zamarripa.
Por lo que la Procuraduría de Justicia ha iniciado una investigación integral a fin de esclarecer estos hecho que están vinculados con las últimas muertes registradas no solo en Celaya, sino en municipios vecinos, según arrojan las indagatorias, “nos permiten afirmar con plena certeza que los eventos acaecidos en los últimos días en esta ciudad tienen directa vinculación entre sí, es por ello que habrá despliegue en materia de investigación hasta el total esclarecimiento de los hechos”, dijo Zamarripa.
Y aunque no quiso decir qué grupo de la delincuencia organizada ha estado ejecutando los últimos hechos violentos en Celaya, indicó que los tienen ubicados y que será en próximos días cuando se revelen mayores avances de la investigación.
UBICAN CAMIONETA DE ATACANTES
El procurador de Justicia, Carlos Zamarripa, indicó que horas más tarde del ataque, fue ubicada sobre la calle Nieto Pinna, casi esquina con Felipe Ángeles en la colonia Resurrección, una camioneta Toyota Linux 2010 color gris, con placas del Estado de México, con reporte de robo.
Sin embargo, no se logró la detención de ninguno de los gatilleros, que según testigos fueron cuatro los que tripulaban la unidad alrededor de las 10:00 de la mañana, cuando llegaron a local de comida sobre la calle Allende 302, esquina con Bocanegra y descendieron armados con “cuernos de chivo”.
Sin mediar palabra, comenzó la refriega en contra del local, causando la muerte del policía ministerial Máximo Palacios Guerrero; el padre de la dueña del negocio, Eusebio Calvillo Hernández y de un comensal, José de Jesús Reinaba Soto
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Dejando heridos también a la dueña del lugar y a otro policía ministerial, quienes se reportan graves de salud. Según la PGJE, los elementos llevaban casos de violencia intrafamiliar y acostumbraban ir a comer a ese sitio, por lo que aún no se ha establecido las causas reales del ataque.
