La Habana, Cubana.- Representantes de la oposición en Cuba acusaron al gobierno de Raúl Castro de ordenar arrestos temporales y otras acciones para impedirles asistir a las misas del Papa Benedicto XVI durante su reciente visita a la isla.
Tras su viaje a México, el pontífice visitó Cuba del 26 al 28 de marzo bajo el lema “peregrino de la Caridad”, con motivo del 400 aniversario del hallazgo de la virgen de la Caridad, santa patrona de la isla.
La ilegal pero tolerada Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) reportó este jueves cientos de detenciones de disidentes y el retiro de indigentes de las calles.
En una nota por internet, el portavoz de la CCDHRN, Elizardo Sánchez, dijo que también cientos de personas permanecieron bajo arresto domiciliario, bajo amenazas de detención, con la misma finalidad.
Agregó que centenares de teléfonos fijos y celulares de disidentes fueron desconectados por la policía hasta este jueves 29.
Sánchez consideró que “los mensajes papales fueron muy cautelosos” porque la Iglesia Católica en Cuba y El Vaticano quieren mantener y mejorar sus relaciones con el gobierno del presidente Raúl Castro.
En su criterio, “el gran ganador con esta visita” es el gobierno “en términos de legitimidad internacional e imagen pública”, mientras la iglesia “verá aumentar sus espacios para la necesaria labor pastoral”.
Reiteró que la CCDHRN todavía no ha podido conocer la identidad del hombre detenido y golpeado que, antes de iniciar el lunes la misa papal en Santiago de Cuba, a unos 900 kilómetros al sureste, gritó una consigna contra el comunismo.
Al partir de Cuba el miércoles, el Santo Padre agradeció el recibimiento y criticó el embargo económico de Estados Unidos, a la vez que abogó porque la isla caribeña sea una casa donde todos vivan con justicia, libertad y dignidad.
Antes de la llegada del pontífice alemán Joseph Ratzinger, voceros de El Vaticano aclararon que el Obispo de Roma no tenía previsto reunirse con líderes de grupos comunitarios, en una alusión a los disidentes locales y otros sectores.
Otros opositores que denunciaron arrestos fueron la líder de las Damas de Blanco, Berta Soler; Laura Labrada, hija de la fallecida líder del grupo, Laura Pollán, y Alejandrina García de la Riva.
El líder del ilegal Movimiento Cristiano Liberación, Oswaldo Payá, contó a medios extranjeros que sí pudo asistir a la misa en La Habana, pese a que su casa estuvo bajo vigilancia policial.
