La presencia del delegado priista Francisco Santillán Oceguera en la reunión de Irapuato, convocada por el empresario filopanista Roberto Marrufo, a la que asistió la corriente chico-barbarista, desató una reacción en cadena este miércoles, cuando la mayor parte de los líderes de sectores, incluso la propia CNC, plantaron al representante de Humberto Moreira en el comité estatal del PRI.
En Irapuato, Santillán exaltó a Miguel Ángel Chico por su propuesta de crear una comisión especial del Congreso para investigar a Juan Manuel Oliva. Como dicha iniciativa careció de consensos previos como el coordinador de la bancada, el cetemista Hugo Varela, la postura del delegado originó que el líder obrero no asistiera a su convocatoria a los sectores para revisar sus planes de trabajo.
Rigoberto Paredes Villagómez, cenecista como Santillán, tampoco acudió y mandó un representante, seguramente porque tenía mejores maneras de ocupar su tiempo. Adrián Camacho Trejoluna, de la CNOP, probablemente decidió apoyar a Varela quien es su jefe en el Congreso, igual que el líder juvenil Jorge Luis Martínez Nava.
El alto comisionado de la dirigencia priista terminó en una mesa con el dirigente, José Luis González Uribe; la secretaria, Yulma Rocha; Alejandro Arias, del MT, que va a todas; y Alejandra Caballero, del organismo de mujeres, todos le echaron en cara sus actitudes sesgadas que están incrementando el divisionismo priista.
Ya en el colmo del sarcasmo no faltó quien preguntara: “¿que éste no será del Yunque?”