El director de la Coordinación para la Planeación de la Inversión Pública de la entidad, el empresario Luis Quiroz, puede no tener mucho tiempo para revisar el ritmo de los proyectos que le ha encargado el gobernador Juan Manuel Oliva, pero en cambio dispone de toda la amplitud de horario para cabildear beneficios para un fraccionamiento del que ha sido socio en la ciudad de León.
El desarrollo se llama Bosque Azul, cómo si no, y aunque asegura que ya no es accionista, todavía tiene mucho interés en su suerte. Por lo pronto, ha sido muy exitoso tramitando una aprobación inicial de la Comisión Nacional del Agua para disminuir el nivel de la presa del Palote y ampliar la superficie urbanizable del predio en cuestión.
Para su mala suerte, sin embargo, parece haberse topado con la resistencia de dos funcionarios: el alcalde panista Ricardo Sheffield y el presidente de Sapal, el priista Jorge Videgaray, quienes han unido fuerzas para impedir lo que sería una tropelía ecológica que recibiría la reprobación unánime de la población de esa ciudad.
Veremos de cuál cuero salen más correas.
