León, Gto. Dos menores de edad fueron privados de la vida por su madre y sus cuerpos localizados cerca de un estanque en el fraccionamiento Punta Dorada, de la ciudad de León.
Soledad Esparza Flores, la madre que ahogó y luego quemó a sus hijos, dijo ante la policía, luego de que fue detenida, que “alguien tenía que morir”, sin embargo no dio más detalles de su atroz actuar.
En relación a lo que circula en este caso, extraoficialmente ha trascendido que la mujer tenía problemas de drogadicción, contaba con antecedentes penales del fuero común y que en su familia eran comunes los casos de violencia intrafamiliar, ya que un pariente de Soledad, cometió actos deshonestos en contra de su hijo barón.
Cabe recordar, que ayer la ciudad de León amaneció con la trágica historia de la madre que asesino a su dos hijos en terreno conocido como Corral Quemado, ubicado en las cercanías de la colonia Puerta Dorada en Las Joyas.
Soledad Esparza Flores, de 27 años de edad, con domicilio en la calle Gorrión de la colonia Puerta Dorada, se desempeñaba como empleada en una fábrica de calzado y trascendió que es originaria de la comunidad Mal Paso en Lagos de Moreno, Jalisco.
Los pequeños, su madre y la pareja sentimental de esta, acostumbraban acudir al paraje donde hay una represa donde se cometió el homicidio.
Los pequeños quienes encontraron un trágico final fueron identificados como Dana Camila Esparza Flores, de 7 años de edad y su hermano Armando Esparza Flores de 10 años, quienes en realidad no vivían con su madre únicamente estaban con ella los fines de semana; ya que ellos habitaban en la casa Hogar “Loyola”.
El domingo, cuando la mujer tenía que regresar a los niños a la Casa Hogar Loyola, sin embargo dijo a los titulares de la casa que no los podía llevar porque se iban a ir a la ciudad de Guadalajara, con su pareja sentimental llamado Carlos Sandoval Andrade, de 35 años de edad.
De ese modo, trascendió que Carlos, recibió un mensaje a su celular, donde Esperanza le dijo su atroz acto luego de que se confesó con un sacerdote y pensaba entregarse a las autoridades.
Sin embargo, Carlos hizo una llamada a la cabina de emergencias de Lagos de Moreno, para reportar el crimen.
El jueves por la mañana, Carlos retuvo a Esperanza al momento que llegaron las primeras patrullas, ya intento escapar, entregándola a las autoridades.
Luego, el novio llevó a los oficiales al lugar donde estaban los pequeños.