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viernes, abril 26, 2024

Muy grandes para caer

Los gobiernos son muy complacientes con las instancias financieras que “lavan” dinero. ¿Será el caso aquí con Carlos Hank Rhon?

Transmite por estos días la televisión de paga un film de HBO basado en el best seller de Andrew Ross Sorkin que, como el libro, se intitula “Demasiado Grande para Fracasar” (Too big to fail) en el que se recrea la crisis financiera de septiembre de 2008 desde la perspectiva de las relaciones entre Washington y Wall Street.

Si usted no ha leído a Ross, vale la pena que mire la película que estelariza William Hurt, en el papel de Henry Paulson, quien a la sazón era el secretario del Tesoro del fallido gobierno de George W. Bush.

Y sí. El sistema financiero mundial, cuyo principal eje se encuentra en la calle Wall del downtown neoyorquino, representa para los políticos del orbe un problema de graves consecuencias para los contribuyentes: es demasiado grande como para dejarlo caer. No importa, incluso, que sus entidades –bancos, financieras, fondos de inversión, corredurías bursátiles, etc.– se dediquen casi abiertamente a actividades criminales como el lavado o blanqueo de dinero.

Los mayores bancos de EE.UU. pueden involucrarse en actividades descaradamente criminales a escala masiva y emerger casi completamente indemnes. El último ejemplo repugnante proviene del Banco Wachovia: Acusado de lavar durante tan sólo cuatro años 380 mil millones de dólares propiedad de cárteles de la droga mexicanos, se espera que el gigante financiero emerja con sólo un tirón de orejas gracias a una política oficial del Gobierno, que protege a los megabancos contra acusaciones criminales.

Desde hace casi dos años, Michael Smith, de Bloomberg, dio cuenta de una devastadora revelación que detalla las operaciones del Wachovia con dinero de la droga y, a un mismo tiempo, la torcida reacción del gobierno de Barack Obama.

El banco hacía transacciones con dinero que provenía literalmente de toneladas de cocaína de los violentos cárteles de la droga que operan en México. No fue por accidente. Denunciantes internos del Wachovia advirtieron que el banco estaba lavando dinero del narcotráfico, los mandamases del banco los ignoraron totalmente para lograr mayores beneficios y el Gobierno de EU está a punto de dejar que todos los involucrados queden impunes. El banco no será acusado, porque es política oficial del Gobierno no procesar a megabancos. Del artículo de Smith:

Ningún gran banco estadounidense… ha sido acusado alguna vez por violar la Leyde Secretos Bancarios o cualquiera otra ley federal. En vez de eso, el Departamento de Justicia resuelve acusaciones criminales utilizando acuerdos de suspensión de actuaciones judiciales, según los cuales un banco paga una multa y promete no volver a violar la ley… Los grandes bancos están protegidos de los enjuiciamientos gracias a una variante de la teoría de demasiado-grande-para-caer. Encausar a un gran banco podría provocar una carrera frenética de los inversionistas para vender acciones y causar pánico en los mercados financieros.

Y justo cuando lavaba esos 380 mil millones de dólares –tres veces las reservas actuales del Banco de México–, Wachovia fue adquirido por Wells Fargo. Esto, a finales de 2008.

Exigen los estadounidenses castigo a los “lavadores” mexicanos. Pero la penalidad que impondrán a Wachovia muy seguramente consistirá en una promesa de no volver a hacerlo y una multa de 160 millones de dólares. La multa es tan pequeña en relación a lo “lavado” que es casi seguro que Wachovia obtendrá beneficios de su negocio de financiamiento de la droga después de considerar costes legales y multas.

Las autoridades internacionales conocen la conexión entre banqueros y narcotraficantes mucho más allá de Wachovia, pero los gobiernos no hacen nada al respecto. Un informe de 2009 de la Oficina de las Naciones Unidas sobre la Droga y el Crimen estableció que la mayoría de las reglas para impedir el lavado de dinero de la droga a través de los bancos se violan.

Parte de ese informe reza lo siguiente:

“En tiempos de quiebras de grandes bancos, los bancos parecen pensar que el dinero no huele. Ciudadanos honestos que enfrentan dificultades en tiempos de penurias financieras, se preguntan por qué los ingresos del crimen –convertidos en ostentosos inmuebles, coches, botes y aviones– no se confiscan”.

A finales de ese 2009, el jefe de dicha oficina de la ONU, Antonio María Costa, dijo a la prensa que muchos préstamos entre bancos –préstamos a corto plazo que los bancos hacen entre sí– se apoyaban en dinero de la droga. Cuando los mercados financieros se paralizaron en 2007 y 2008, los bancos se volvieron hacia los cárteles de la droga para obtener dinero. Es posible que muchos bancos importantes no hubieran sobrevivido sin ese dinero de la droga.

La pregunta es, claro, si lo antes descrito ¿también priva en México?

Índice Flamígero: Con respecto a la entrega anterior, las empresas de los hermanos Carlos y Jorge Hank Rhon que también han sido investigadas por el IRS (Servicio de Rentas Internas, o SAT) de los Estados Unidos, lo mismo que del CID (División de Investigación Criminal) son Grupo Hermes, Interacciones y Agua Caliente Racetrack y Marketing. Por su presunto involucramiento en lavado de recursos opacos, sucios, de la administración de Enrique Peña Nieto. Le seguiré informando…

Francisco Rodríguez
Francisco Rodríguez
Correo electrónico: pacorodriguez@journalist.com Twitter: @pacorodriguez www.indicepolitico.com

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