El Ministerio de Justicia de Egipto reveló que Hosni Mubarak, quien fue derrocado como presidente luego de un régimen de casi 30 años, podría enfrentar la pena de muerte en caso de ser condenado por ordenar el tiroteo en contra de manifestantes durante los levantamientos que generaron su salida.
El ministro Mohammed el-Guindi dijo a la prensa que Mubarak, sus dos hijos y su esposa también enfrentan acusaciones por corrupción. La ex primera dama Suzanne Mubarak será interrogada por primera vez dentro de los próximos días por la manera en que amasó su fortuna.
Mubarak, de 82 años, fue el segundo líder árabe en ser derrocado por las revueltas populares conocidas como la Primavera Árabe. El 11 de febrero pasado entregó el poder a las fuerzas armadas tras 18 días de inéditas protestas contra la pobreza, la corrupción y la represión, en los que su apoyo militar se evaporó.
El ex presidente fue puesto bajo arresto en el hospital Sharm el-Sheikh debido a problemas cardiacos. Al menos 846 murieron durante las manifestaciones.
Con información de agencias.
