La señora Cristina Rodríguez Tovar asistió a la marcha para defender los derechos de los homosexuales, pues dijo, ella tiene una hija gay de la cual se siente orgullosa.
Portando una cartulina con la consigna “Mi hija es gay, Dios la ama y su madre también. Dios es amor”, Doña Cristina afirmó que nadie tiene el derecho de juzgar a los homosexuales.
“Mi hija es gay y estoy muy orgullosa de ella, ella está en Canadá y tiene su grupo que defiende los derechos de los jóvenes homosexuales, lesbianas, de madres solteras, y yo estoy de acuerdo y muy orgullosa de mi hija porque es mi hija porque nueve meses la traje en mi vientre independientemente de su preferencia sexual”, sostuvo.
En tanto, Fidel Negrete Vázquez, integrante del Colectivo León Gay, hizo un llamado al gobernador Juan Manuel Oliva para que se respeten sus derechos y no permitan manifestaciones que violenten sus garantías.
“Es una llamada de atención también para el gobernador Juan Manuel Oliva para que haga valer la Constitución para que no se permitan este tipo de manifestaciones por parte de la Iglesia que están restringiendo derechos de otras personas…le llaman a favor de la vida pero básicamente es pisotear los derechos sexuales y reproductivos ”, dijo.
Por su parte, Aldo “N”, de 17 años de edad, sostuvo que no están en contra de la religión católica sino del respeto a sus derechos.
“No venimos en contra de la religión, únicamente queremos que se nos respete”, manifestó.
