Tras la des habilitación total de la Policía Preventiva de Tarandacuao y de la mitad de elementos de la de Acámbaro, por presuntos nexos con el crimen organizado, el gobernador del estado, Juan Manuel Oliva Ramírez, advirtió que las revisiones seguirán en las policías municipales que colindan con Michoacán. Pidió cooperación a los alcaldes a fin de permitir la intervención.
Luego de que este fin de semana se des habilitara por completo la Policía Preventiva de Tarandacuao, huyendo el director y su hermano; y que este martes se inhabilitaran a 130 elementos policíacos de Acámbaro, incluyendo a su director, por supuestos nexos con el narcotráfico, extorsión y secuestro, el gobernador advirtió que las revisiones seguirán en los municipios que colindan con el estado de Michoacán.
“Tenemos que trabajar en mantener la frontera con Michoacán en las mejores condiciones y sobre todo garantizar que no haya personal infiltrado de bandas delincuenciales, esto es muy importante precisarlo”, dijo, agregando que los trabajos están encabezados por la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), apoyados con agentes de la PGR y la Policía Federal, así como la intervención de militares en el momento que sea necesario.
Aunque no adelantó qué municipios podrían seguir con la “limpia”, puesto que serán tácticas sorpresa, dijo que “tenemos que trabajar en mantener la frontera con Michoacán en las mejores condiciones y sobre todo garantizar que no haya personal infiltrado de bandas delincuenciales”.
Exhortó a las autoridades de cada municipio limítrofe con Michoacán a cooperar con los operativos, “hemos encargado este trabajo en este corredor, en esta frontera con Michoacán y nosotros esperamos la colaboración de los alcaldes y alcaldesa; obviamente esperamos la participación de las instancias federales como se ha dado hasta el momento y que también las instancias estatales sigan trabajando”.
Y es que según dijo Oliva Ramírez, la detención de policías y jefes en Tarandacuao y Acámbaro, obedece a un mandato federal, tras las suspicacias que señalan la posible complicidad entre las corporaciones de policías y el crimen organizado para operar en dichos municipios, “firmamos un acuerdo por la seguridad, por la legalidad de México, en particular, nosotros por Guanajuato y en ese orden y en ese sentido es que estamos trabajando y seguiremos trabajado”.
Por ahora, la Procuraduría General de la República (PGR) tiene 23 elementos policíacos de Tarandacuao bajo investigación; sin embargo, el director de la Policía Municipal, Jesús Cárdenas Gómez, sigue prófugo, junto con su hermano, quien fungía como subdirector operativo. Allí, las Fuerzas del Estado han tomado el mando.
El martes en Acámbaro, dos helicópteros y agentes federales tomaron por sorpresa la Dirección de Policía, deteniendo a 130 elementos, entre ellos su director, Pedro Gutiérrez Ávila, bajo la sospecha de colaborar con el crimen organizado. Esta tarde del miércoles, la PGJE presentó a los presuntos implicados quienes serán turnados a la PGR a fin de que se sigan las investigaciones y se deslinden responsabilidades.
Aunque hasta hoy se han revisado dos municipios vecinos a Michoacán, el estado de Guanajuato comparte límites en los municipios de Coroneo, Salvatierra, Santiago Maravatío, Moroleón, Uriangato, Yuriria, Valle de Santiago, Huanímaro y Pénjamo.
