Son 60 denuncias de guanajuatenses desaparecidos que iban con rumbo a la frontera del norte del país, atravesando el estado de Tamaulipas, las autoridades ya han confirmado la identidad de diez de ellos. Pero ¿dónde están los demás?, la pregunta la formulan las familias que aún tienen la esperanza y la angustia de saber de ellos y volverlos a ver.
Luego de que los trabajos periciales confirmaran entre los cadáveres a un irapuatense y tras el rescate de 129 personas que permanecías secuestradas en Tamaulipas, nueve resultaron ser oriundos del estado de Guanajuato, suman diez los esclarecimientos de desaparecidos que posee la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), pero aún queda pendiente el paradero de 50 guanajuatenses, de los que no se sabe nada.
Aunque la espera fue tardía para muchos, las noticias, buenas y malas, llegaron, algunos con vida y otro que no corrió con la misma suerte; sin embargo, las autoridades federales y estatales aún trabajan en la identidad de más personas.
Fernando Cuyás Martínez, coordinador General de Servicios Periciales de la PGJE, permanece en la Ciudad de México, donde ha estado coadyuvando en la identidad de los cuerpos y donde aún hay esperanzas de ubicar a más guanajuatenses.
Con las noticias, viene un aliento para familias de Valle de Santiago, Tierra Blanca, San Felipe, Irapuato, Celaya y Salamanca, que han denunciado la desaparición de sus familiares, los que viajaron desde hace casi un mes en busca de trabajo y de opciones que dieran una mejor vida a sus familias que se quedan acá y que viven en marginalidad.
Aunque las posibilidades se agotan hora con hora, con los resultados, las esperanzas también siguen vivas a fin de poder saber que su hijo, su hermano, su padre o su entrañable compañero, ha sido encontrado. La pregunta sigue pendiente para la mayoría, ¿dónde están?
