CELAYA, Gto. Padres de familia de la escuela Josefa Ortiz de Domínguez de turno matutino, y Gabriela Mistral en su turno vespertino, de la colonia Los Naranjos; clausuraron la entrada del inmueble y le impidieron el paso a alumnos y maestros como protesta por las cuotas voluntarias que ascienden a 250 pesos y que según dicen se han vuelto obligatorias según exige el director para entrar a cases.
Entre las quejas que mayormente corresponden al turno verpertino, los padres mencionan el hecho de que les cobran 150 pesos para la construcción de un domo que ya es financiado por la presidencia municipal.
Se quejan también porque la maestra Adriana Vega Monsiváis, enferma de cáncer, no se ha presentado a trabajar y por ello los alumnos del segundo grado se quedan sin clases pues el muchacho que se queda en su lugar, aseguran, no es maestro; y además los niños de cuarto año todavía no tienen sus libros de texto.
Jorge Murillo Segovio negó los hechos, dijo que es mentira y que todo está bien, aunque los padres de familia aseguran que incluso se han quejado a la delegación y no les han tomado en cuenta, por eso han cerrado las puertas de la escuela con cadenas, candados y cuerdas.
Por su parte, La Secretaría de Educación de Guanajuato, a través de un comunicado informó que “la Escuela Primaria Gabriela Mistral de Celaya se encuentra trabajando con normalidad, luego de que un grupo de padres impidiera el acceso al plantel debido al ausentismo por motivos de salud de la docente titilar del grupo de segundo grado”.
“En este sentido, el supervisor escolar Daniel Cuna, conversó con los padres de familia y se comprometió a asignar un docente de apoyo de su misma zona, para atender el grupo cuando por motivos de salud la docente al frente del grupo así lo requiera, a lo que los padres de familia accedieron y se comprometieron a no interrumpir el servicio educativo y acercarse a las autoridades educativas para la búsqueda de soluciones en beneficio de los alumnos.”
