Guanajuato, Gto.- Aclarar si es cierto que el Puente de los Desterrados fue dañado por las obras que se hicieron en la calle de Sangre de Cristo en la pasada administración es otra de las tareas pendientes del gobierno municipal que asumió el poder el pasado diez de octubre.
El Puente de los Desterrados, o de Peñaranda, es parte de la calle de Sangre de Cristo, sirve para pasar sobre la calle del Padre Belauzarán, calle que se construyó sobre el río de Pastita; el puente que data de la época de la colonia se presume que fue dañado con las obras de cambio de piso que se hicieron en la pasada administración.
Los supuestos daños a la estructura del puente, se afirma es la verdadera causa por lo que se impidió que las pesadas unidades del Servicio Público de Trasporte Urbano con Ruta Fija continuaran pasando por el puente al concluirse las obras en la Calle de Sangre de Cristo.
El entonces alcalde Luis Fernando Gutiérrez Márquez, y su director de obra pública, Jorge Ignacio de la Peña Gutiérrez, siempre negaron que se dañó la estructura del puente, argumentando que el cambio en las rutas del trasporte urbano se decidió porque esa calle es muy angosta y hay mucho tráfico peatonal.
La explicación del ingeniero Gutiérrez Márquez, mucha gente sigue sin aceptarla, como son los integrantes del Observatorio Ciudadano de Guanajuato, quienes piden que se aclare la versión que señala que el puente fue dañado y por eso se determinó impedir que pasen los camiones del trasporte urbano sobre el puente.
Si resulta que efectivamente el puente está dañado, será un asunto más por el que tendrán que responder las pasadas autoridades municipales.
El primero de octubre de este año, nueve diez antes de que concluyera el ejercicio legal de la pasada administración, las unidades del servicio público retomaron la ruta que se les obligó a suspender con las obras de la calle de Sangre de Cristo, pero solo fue ese día, tránsito municipal impidió que continuarán pasando al día siguiente por el Puente de los Desterrados.
Con el cambio del derrotero de los camiones del servicio público, se afectó a los usuarios de ese servicio, pues para ir de lugares como la Plazuela de Mexiamora, la Plaza Allende y los callejones de esa zona, hacía el Mercado de Embajadoras, la Presa de la Olla, Pastita o el Cerro de los Leones, se tiene que caminar hasta la calle de Alonso y bajar por la rampa que esta frente al pasaje Alexander Von Humbold a la calle subterránea en donde está la parada de los camiones del trasporte público.
Por ello el tema de si está o no dañado el puente de Los Desterrados, es un problema que atañe a mucha gente, aunque el solo hecho de que en realidad haya sido afectada la estructura de la construcción colonial sería un hecho grave.
Si se afectó el Puente de los Desterrados con las obras que se hicieron en la calle de Sangre de Cristo, deben de fincarse responsabilidades, afirman los integrantes del Observatorio Ciudadano de Guanajuato.
Por cierto que en las obras que se hicieron en la Calle de Sangre de Cristo y que comenzaron en noviembre del 2013 y concluyeron en abril del 2014, son parte del llamado rescate del centro histórico de la ciudad, un compromiso del presidente de la república Enrique Peña Nieto, en las que se invirtieron 24 millones de pesos.
